El pisco entró en debate, sobre todo en la exportación a Chile, debido a que dicho país admite el ingreso bajo el nombre de aguardiente o destilado de uva, pero no como pisco.

Dicho mercado ahora concentra el 30% de las exportaciones de pisco, pero este volumen de envíos a Chile solo representa el 1% de las ventas de los industriales.

Han sido 10 las empresas peruanas que realizaban envíos regulares de pisco a Chile, con las mismas marcas que comercializan localmente, pero indicando que se trata de un destilado de uva o un aguardiente de uva, renunciando así a la Denominación de Origen Pisco.

Según Ray Meloni, Director de Signos Distintivos de Indecopi, los industriales le habían comentado que harían un cambio en las marcas, para así no ver afectado la Denominación de Origen Pisco, que dicho sea de paso, fue reconocida en la víspera como marca renombrada.

Al respecto, el presidente del Comité Vitivinícola de la Sociedad Nacional de Industrias, Santiago Queirolo, dijo que harán lo que el Indecopi les indique, y que ellos seguirán comercializando tal como ya lo han venido haciendo, hasta que el regulador diga lo contrario.

“Estamos abasteciendo a un mercado que es importante para la industria peruana, y ellos están ávidos en el consumo”, remarcó.

En el caso del cambio de marca, Santiago Queirolo, dijo que están evaluando, pero que no tienen una decisión definida.

Reafirmó que, más del 90% de la producción de pisco se comercializa en el mercado local, y solo una porción pequeña conquista los mercados en el exterior.

Respecto a la salida al exterior, dijo que entre los últimos mercados a los que ha llegado el pisco, es Inglaterra.