Representantes de 17 países firmaron un comunicado conjunto instando a un cese al fuego inmediato y prometieron interrumpir los contactos con las facciones que no acepten el acuerdo.
Las ciudades de China están entre las más sucias del mundo después de tres décadas de crecimiento económico explosivo que llevaron a la construcción de cientos de plantas eléctricas de carbón y al aumento del parque automovilístico.