Suizhong.- La renovación de una porción de la Gran Muralla de China, recubierta de una espesa capa de cemento gris, provocó una gran indignación entre los internautas chinos, que denunciaban la desfiguración de este emblemático monumento. El tramo de Xiaohekou, de unos ocho kilómetros de largo y situado en la provincia de Liaoning (nordeste), fue construido en 1381 bajo la dinastía Ming, y estaba considerado uno de los "más bellos" de la Gran Muralla "salvaje", es decir las partes donde está hundida y no restaurada. Sin embargo, según las imágenes colgadas en internet, los escalones desiguales y las piedras de su parte superior han desaparecido bajo un "camino" de un gris blancuzco, una espesa capa de cemento que cubre todo el ancho. Las obras de restauración se llevaron a cabo entre 2012 y 2014 para preservar el monumento tras unas inundaciones, explicó la Administración Nacional de Patrimonio Histórico, en respuesta a las críticas. El organismo abrió una investigación sobre estas obras y prometió tratar severamente a los eventuales responsables (foto: AFP).