La desaparición de una de las versiones más populares de Popcorn Time trajo consigo una ola de aplicaciones similares y el debate sobre las fronteras de las descargas ilegales en la industria audiovisual.
Por ser alguien que invirtió casi US$ 10,000 millones del dinero de sus clientes en películas, Tim Levy no muestra mucho entusiasmo por el mundo del espectáculo.
Recuperar las cintas más míticas del cine es un movimiento rentable para la industria del séptimo arte. El Rey León lo demostró en 2011. Ahora algunas cadenas buscan corroborarlo a nivel local.