Entre 40 y 50 proveedores, principalmente extranjeros, estaban listos para llegar y abastecer a la planta de San Luis Potosí, dijo Sergio Resendez, de la firma de bienes raíces Colliers International.

La nueva planta de ensamblaje representaría una inversión de más de US$ 1,000 millones para Toyota.

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El distrito ubicado en el norte de Lima contaría con 1,141 hectáreas para la instalación de medianas y pequeñas industrias, según propuesta del PLAM 2035.

Un funcionario mexicano adelantó que la inversión total podría ascender a US$ 2,500 millones, con 1,000 millones directamente de Kia y el resto de proveedores.