La decisión del Poder Ejecutivo egipcio allanaría el camino para que el jefe militar Abdel Fattah al-Sisi anuncie su candidatura a la Presidencia.

La decisión da a las autoridades egipcias el poder de acusar a cualquier miembro del movimiento del presidente depuesto Mohamed Mursi de pertenecer a una organización terrorista.

Corte egipcia extendió la medida a “cualquier organización derivada de ese grupo”, en el marco de una campaña para debilitar al movimiento del depuesto mandatario Mohamed Mursi.

La decisión se aplica a la organización no gubernamental registrada por el grupo político en marzo en respuesta a una demanda que argumentaba que este no tenía estatus legal.

En su primer discurso, Mohamed Mursi dijo: “Cuidaré los intereses del pueblo y protegeré la independencia de la nación y la seguridad de su territorio”.