Joerg Asmussen, miembro de la autoridad monetaria, descartó que la medida sea riesgosa, pues puso como precondición que cada país lleve a cabo reformas claves, mientras el BCE hace su parte con el control de precios.
Joerg Asmussen, miembro del Banco Central Europeo, dijo que “si las metas fiscales son cambiadas en uno o dos años en el futuro, eso requeriría de inmediato financiamiento externo adicional de la zona euro y del FMI”.