Los líderes europeos acordaron que dentro de una semana se elabore la lista de nuevas medidas que podrían afectar a varios sectores.

Dichos envíos llegaron a 25.4 millones de toneladas, y buena parte de los embarques fueron a países de Medio Oriente, África y Asia.

“Iniciar una guerra civil y que no pase nada, eso costaría mucho más que unos pocos puntos porcentuales de posible crecimiento”, declaró el vicecanciller de Alemania.