El mercado chino se recuperó en las últimas sesiones después de que Pekín anunció medidas para aliviar el temor de los inversores a través de generosas inyecciones de efectivo en el mercado interbancario y comentarios favorables.

En China, el sistema financiero descapitalizado, el crecimiento desequilibrado y el exceso crónico de capacidad traen a la memoria de los analistas de Merrill Lynch el Japón de 1992.