Agitación política anticipa problemas para megafusiones en el 2017

Las mayores transacciones implicaron, en su mayor parte, a compradores y vendedores de distintos países: la compra por parte de Bayer AG de Monsanto Co. en Estados Unidos, la oferta de China National Chemical Corp. por Syngenta AG y la compra de ARM Holdings Plc por parte de SoftBank Group Corp.

Las empresas chinas se enfrentan a un escrutinio regulador en el extranjero, con creciente oposición en Estados Unidos y Europa. (Foto:Reuters)
Las empresas chinas se enfrentan a un escrutinio regulador en el extranjero, con creciente oposición en Estados Unidos y Europa. (Foto:Reuters)

Bloomberg.- Mientras las empresas se preparan para el impacto de las sorpresas políticas del 2016 y las elecciones pendientes para este año, el apetito global por las megafusiones podría ralentizarse, en medio de las expectativas de un proteccionismo en aumento.

Las mayores transacciones implicaron, en su mayor parte, a compradores y vendedores de distintos países: la compra por parte de Bayer AG de Monsanto Co. en Estados Unidos, la oferta de China National Chemical Corp. por Syngenta AG y la compra de ARM Holdings Plc por parte de SoftBank Group Corp.

Los acuerdos transnacionales supusieron más de la mitad de las adquisiciones superiores a US$ 25,000 millones anunciadas en el 2016, según datos reunidos por Bloomberg. También han sido casi la mitad de los acuerdos anunciados por un total de US$ 3 billones, muestran los datos.

Pero las fuentes de las fusiones y adquisiciones internacionales se están volviendo más introvertidas y proteccionistas, y aún no está claro cómo van a afectar los cambios políticos a los negocios.

Las empresas chinas se enfrentan a un escrutinio regulador en el extranjero, con creciente oposición en Estados Unidos y Europa, y a restricciones a los megaacuerdos en su país.

En Occidente, con Donald Trump elegido como próximo presidente de Estados Unidos: una decisión con implicaciones potenciales para las facturas de impuestos de las compañías estadounidenses y para la recepción que los compradores, en particular de origen chino, podrían encontrar al optar por activos del país.

En Reino Unido, que ha votado a favor de abandonar la Unión Europea, la primera ministra, Theresa May, ha declarado que el país necesita “una verdadera estrategia industrial”, que pueda utilizarse para defender a sectores y empresas como la farmacéutica AstraZeneca Plc.

El año que viene, en Europa se celebrarán elecciones en Países Bajos, Francia y Alemania que podrían desplazar a los mandatarios actuales y reforzar los movimientos populistas y naciona-listas en todo el continente. Estos votos podrían tener ramificaciones para la UE y la eurozo-na, provocando mayor inestabilidad y volatilidad en la divisa del bloque.

Regulación
Las principales adquisiciones ya han experimentado un declive este año. Hubo 13 acuerdos de más de US$ 25,000 millones anunciados en el 2016, un poco por debajo del año previo, según datos reunidos por Bloomberg.

El valor de las transacciones totales anunciadas ha caído cerca de 18% respecto al año 2015.

“La falta de confianza no es buena para cerrar acuerdos”, opina Hernán Cristerna, codirector mundial de fusiones y adquisiciones en JPMorgan Chase & Co. en Londres.

“Si los responsables de empresas intentan medir los beneficios de un gran acuerdo y no sa-ben cómo va a resultar el entorno normativo, algunos dudarán a la hora de pulsar el botón”.

Asia
China, cuyas empresas han gastado más de US$ 200,000 millones en acuerdos fuera de sus fronteras en el 2016, más del doble del año previo, planea recortes a las adquisiciones extran-jeras de sus compañías que durarán hasta setiembre, informaron el en noviembre pasado fuentes con conocimiento de la materia.

Esto incluye prohibir la mayoría de inversiones de US$ 10,000 millones o más.

“El impacto de las normas de control de capital aprobadas en China aún tiene que ser medido, ya que las empresas chinas han estado entre los impulsores más activos de fusiones y adquisiciones en los últimos años”, ha analizado Thomas Piquemal, director mundial de fusio-nes y adquisiciones en Deutsche Bank AG en Londres.

Presidente Trump
Mientras Trump se prepara para entrar en funciones en enero, varias de sus propuestas podrían tener radicales implicaciones para las empresas que quieran realizar negocios y acuer-dos en Estados Unidos.

Ha mencionado exenciones fiscales que podrían conducir a la repatriación de fondos de com-pañías estadounidenses mantenidos en el extranjero, y facturas de impuestos más bajas.

Esto podría liberar miles de millones de dólares para fusiones y adquisiciones en el país, ade-más de recompras de dividendos y acciones.

“Esto liberaría capital para fusiones y adquisiciones y estimularía una ola de acuerdos”, reve-laba el director ejecutivo de LionTree Advisors, Aryeh Bourkoff, en su carta de fin de año a su plantilla. “La repatriación podría ser especialmente beneficiosa para Apple, Microsoft, Alpha-bet, Cisco y Oracle, que mantienen un capital total combinado estimado en el extranjero.

TAGS: Syngenta

ÚLTIMA HORA ver todas

BLOGS ver todos

Revolución digitalPablo Bermudez

Bye bye Dubai... ¡Bienvenido NEOM! (1 de 3)

Herejías EconómicasGermán Alarco

Plan Estratégico de Desarrollo Nacional (PED...

El Vino de la Semana

Pisco, amor por el Perú

Te lo cuento fácilAlumnos de la Universidad del Pacífico

Guerra en Ucrania: un breve análisis del fac...

Economía para todosCarlos Parodi

Estados Unidos y China

WALL STREET VER TODOS

Será noticia

JOSÉ ANTONIO MONTENEGRO