Tras el pedido de la bancada de Fuerza Popular, de mayores detalles sobre cómo dejó el Estado la administración de Ollanta Humala, el titular de Economía y Finanzas, Alfredo Thorne, aseguró que se heredó en materia económica una situación preocupante.
“El déficit fiscal llegó al 3.3% del PBI en los últimos doce meses, es decir, a julio del 2016 cuando el Gobierno saliente se había comprometido a que el déficit llegaría al 2.5%, habiendo además heredado un superávit de 2.2% en el 2011. La deuda pública llegaría al 25% del PBI el 2016 mientras que la deuda neta a 9.6% después de haber sido 22.1% y 8.6%, respectivamente el 2011”, explicó el funcionario ante el Congreso.
Agregó que existen dos tipos de compromisos fiscales, que no son una deuda adicional, y que se vienen atendiendo con el presupuesto anualmente, uno es producto de los compromisos de las asociaciones público-privadas (APP) y el cofinanciamiento de la deuda pública, el cual llega a 3.1% del PBI dentro del margen que el Congreso les ha otorgado de cerca de 12%.
“El otro es producto del déficit actuarial pensionario que asume el tesoro público y que llega al 29% del PBI. Esto no es deuda pública y está considerado dentro del presupuesto anualmente”, apuntó.
En esa línea, afirmó que la contra cara fue la caída de la inversión pública, que en el acumulado a julio fue de 23% real anual. “También es preocupante el gasto, sobre todo el incremento de los haberes que ha sido del orden del 100% en este quinquenio”, subrayó.
También dijo que respecto a los compromisos asumidos por el Gobierno de Humala, “nos encontramos en una situación compleja, ya que en el caso de salarios los compromisos hacia futuro son de S/ 3,300 millones en el 2015. En el caso de la inversión pública, de S/ 28,000 millones comprometidos para el 2017 antes de que podamos abrir nuestro presupuesto y con limitado espacio fiscal que contamos”.
Ante este panorama, alertó que tendrán grandes dificultades para priorizar los nuevos proyectos que pretendía emprender la administración del presidente Pedro Pablo Kuczynski. Asimismo, denunció que también encontró un incremento sustantivo en los programas sociales emprendidos por Ollanta Humala.
“Los cuales pasaron de costar S/ 1,562 millones por año en el 2011 a S/ 4,990 millones en el 2015. Tengo un firme compromiso de cambiar estas tendencias y en mi gestión tendremos un manejo responsable de las cuentas públicas”, subrayó el ministro.