Los clubes de fútbol no pasan por su mejor momento en el ámbito financiero. Son cinco –Alianza Lima, Universitario de Deportes, Sport Boys, Melgar y Cienciano– los que están en proceso concursal y uno de estos ni siquiera tiene aprobado su plan de reestructuración.
Pese al complejo momento que atraviesan los clubes, algunos han continuado generando mayores deudas y presentando déficits.
Aunque tener grandes empresas detrás que ayuden a equilibrar sus finanzas, los altos sueldos de los jugadores profesionales, en comparación con el sueldo promedio regional, distorsionan el presupuesto de los clubes.
“Los clubes, en su mayoría, son deficitarios. Tenemos clubes que tienen grandes empresas detrás, y que los financian y permiten que se puedan dar esos sueldos (…) Estructuralmente, el fútbol peruano no ha llegado a despegar por sí solo, está sujeto a que haya una gran empresa detrás”, explica Raúl Rosales, director de la carrera de Administración y Negocios del Deporte de la UPC.
El profesor de la UPC afirma que, para mejorar las finanzas de los clubes de fútbol, se deben “sincerar” los sueldos de los jugadores a montos que sean sostenibles en el tiempo e invertir mucho más en las divisiones menores, y así crear una “cantera” de talentos.
“En el Perú, todavía seguimos dependiendo mucho de los ingresos de los derechos de televisión, luego (viene) derechos de entrada, y marketing, es decir, auspicios (…) Hay mucha responsabilidad de los clubes que sus canteras se vuelvan generadoras de ingresos y de activos intangibles”, indicó Rosales Zavaleta.
Para los clubes en pleno proceso concursal, el desafío está en no gastar más que sus propios ingresos y hacer un presupuesto realista. Así, evitarán resultados deficitarios, que usualmente son cubiertos por las grandes empresas detrás de los clubes.