(Bloomberg).- La ofensiva de Mauricio Macri para atraer la inversión extranjera a Argentina podría quedar bloqueada el viernes cuando se reúna con José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica SA, que ha suspendido las inversiones en el país por diferencias con el gobierno.

La visita de estado de cuatro días que Macri comenzó el miércoles en España ha sido bien recibida por las autoridades gubernamentales, los diputados, grupos empresariales y medios de comunicación.

Un contexto de marcado contraste con los intercambios glaciales y formales entre la ex presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner y la nación europea después de la nacionalización en el 2012 de YPF SA, propiedad de Repsol SA.

Sin embargo, Macri aún no ha encandilado a Álvarez-Pallete, que respalda las reiteradas quejas de Telefónica por el trato injusto en el país sudamericano y el favoritismo al conglomerado local de medios más grande de Argentina, el Grupo Clarín SA.

“Tenemos algunos desacuerdos con el gobierno”, dijo Álvarez-Pallete el jueves en una conferencia telefónica con analistas cuando se le preguntó sobre sus operaciones en Argentina.

La compañía ha visto frenados sus intentos de competir en el mercado y ha retrasado sus inversiones en cables de fibra óptica de banda ancha hasta que se encuentre una solución, dijo. También hizo comentarios similares en una conferencia de prensa posterior, antes de dirigirse a un almuerzo entre Macri y empresarios españoles con intereses en Argentina.

Álvarez-Pallete mencionó las preocupaciones sobre el acceso a las frecuencias de telefonía móvil, que la compañía había adquirido antes de que Macri asumiera el poder en diciembre del 2015, así como las restricciones a las ofertas de paquetes de servicios que engloban internet, televisión y telefonía hasta el próximo año.

También criticó al gobierno por dejar que la operadora de telefonía móvil Nextel, propiedad de Clarín, use cierto espectro. Se negó a comentar sus expectativas para la reunión del viernes o si la compañía planea presentar una queja ante la autoridad de arbitraje del Banco Mundial, el Centro Internacional de arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (ICSID por sus siglas en inglés).

El ejecutivo dijo que ve una mejor situación macroeconómica en Argentina y una inflación que se está desacelerando. Telefónica ha demostrado “su buena voluntad” para conversar con el gobierno y espera encontrar una solución, dijo Álvarez-Pallete a los periodistas.

Macri hablará el viernes en un panel organizado por el periódico El País. Telefónica posee una participación del 13 por ciento en Promotora de Informaciones SA (PRISA) y también copatrocinará el evento.

Además de Álvarez-Pallete, Macri también se reunirá con Isidro Fainé, de Gas Natural SDG SA. Fainé también es uno de los miembros más antiguos de la junta Telefónica y presidente de Criteria Caixa SA, que controla CaixaBank SA, el mayor accionista de Telefónica.

Los intereses de Fainé y Criteria en Argentina no se limitan a Telefónica: Gas Natural también opera en el país, al igual que el operador de autopistas Abertis Infraestructuras SA, que en diciembre del 2015 presentó una queja ante el ICSID contra el gobierno de Macri por los precios. Criteria, la compañía que preside Fainé, es el mayor accionista de Abertis y Gas Natural.