(Reuters) .-El Banco Central de Chile dejó estable el martes la tasa de interés referencial, como esperaba el mercado, y reafirmó que se requerirá de un menor estímulo monetario pero a un ritmo que dependerá de los datos de inflación y actividad doméstica.
La Tasa de Política Monetaria (TPM) completó así cuatro meses en su actual nivel de 3.5%, lo que se enmarca en un ciclo de gradual retiro del estímulo monetario iniciado en la última parte del año pasado para hacer converger la inflación al horizonte de proyección (3.0%).
“El Consejo estima que para asegurar la convergencia de la inflación a la meta se requerirá continuar con la normalización de la política monetaria, a un ritmo que dependerá de la nueva información que se acumule y de sus implicancias sobre la proyección de inflación”, dijo el ente en un comunicado.
La decisión del Banco Central estuvo en línea con lo esperado por el mercado, que ha pronosticado un alza de la TPM hacia la segunda mitad de este año.
Hasta el mes pasado, el consejo del Banco Central había admitido que la convergencia de la inflación a la meta seguía requiriendo de un retiro parcial del estímulo monetario, “aunque a un ritmo más pausado”, por el bajo dinamismo de la economía.
Aunque analistas destacaron que el organismo rector en la reunión de abril no modificó el sesgo alcista, sí introdujo un cambio de lenguaje al reemplazar la referencia “ajustes pausados”.
“Esto sugiere que volvió a tratarse el asunto del sesgo”, dijo Benjamín Sierra, economista de Scotiabank.
En sus antecedentes para la reunión de abril, el organismo rector había dicho que las expectativas que se recogen de los activos financieros postergaron nuevamente el momento de la próxima alza, aunque de todos modos se sigue previendo que esta tenga lugar durante el segundo semestre.
El Banco Central “(sigue) manteniendo un sesgo alcista en la tasa pero más moderado respecto a comunicados anteriores”, dijo Antonio Moncado, economista del banco Bci.
“Supedita los próximos movimientos a información coyuntural que se acumule”, agregó.
La actividad económica atraviesa por un bajo desempeño, pese a anotar en febrero una sorpresiva alza del 2.8%, mientras que la inflación anual ha comenzado a mostrar señales de moderación, pero aún se ubica por encima del rango de tolerancia del Banco Central del 2.0% al 4.0%.
En marzo, la inflación fue menor que lo previsto y su variación anual se ubicó en 4.5%.
“Las perspectivas indican que (el indicador anualizado) permanecerá por sobre 4% por algunos meses. Las expectativas de inflación a dos años plazo permanecen en 3 por ciento. La evolución de estas variables se seguirá monitoreando con especial atención”, dijo el instituto emisor en su comunicado.