(Reuters).- Al igual que el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial dio a conocer sus proyecciones económicas para los próximos dos años. Estima que el Perú crecerá 2.79% este año y 3.62% el próximo.
El Banco Mundial se muestra más optimista que el FMI, que también reportó hoy sus estimaciones para la economía peruana: 2.4% este año y 3.3% en el 2016.
La entidad liderada por Jim Yong Kim estima que América Latina no crecerá este año y el próximo su expansión será de un modesto 1% debido a una caída de los precios de las materias primas.
La previsión de un crecimiento nulo para este año contrasta con una anterior del organismo en abril, cuando predijo que la actividad económica en América Latina y el Caribe avanzaría un 0.8%, pero aún así es más optimista que la del Fondo Monetario Internacional, que anticipó una contracción de un 0.3% en la región.
“Si bien se espera todavía que 2016 sea un año de recuperación económica, las previsiones de crecimiento también se han vuelto menos optimistas, reflejando crecientes incertidumbres respecto de la economía mundial, la de China en particular”, anotó el reporte del Banco Mundial que inició hoy en Lima sus reuniones anuales.
El banco dijo que si bien la evolución económica de los países de la región -que dependen de las exportaciones de minerales, petróleo y alimentos- refleja una incertidumbre global, los impactos son diferentes.
Sudamérica, por ejemplo, está siendo “gravemente afectada” por el deterioro de sus términos de intercambio y la desaceleración de la inversión de China, el principal consumidor de las materias primas de la región.
Brasil, la mayor economía latinoamericana, sufrirá una contracción económica de un 2.58% este año y de un 0.61% el próximo.
Pero en países como Colombia y Uruguay se espera un crecimiento “respetable” para este año, con tasas superiores al 2%.
Asimismo, la región de Centroamérica, encabezada por México, está recuperándose más rápido debido al repunte del consumo de Estados Unidos, agregó el reporte del organismo, que prevé para este año una expansión de un 2.35% de la segunda economía latinoamericana.
El Banco Mundial dijo que la región deberá enfrentar el actual escenario con un espacio de política monetaria, fiscal y cambiara más limitado.
Muchos países de la región han tomado medidas para estimular sus economías, pero la depreciación de sus monedas frente al dólar y una aceleración de la inflación han limitado a sus bancos centrales.
El Banco Mundial destacó también que el impacto adverso de la desaceleración sobre el mercado laboral y los ingresos ha comenzado a sentirse en la región, principalmente en Sudamérica.
“La mayoría de los países de la región se encuentra en el medio de un ajuste frente a una nueva realidad con menores ingresos por exportación”, dijo Augusto de la Torre, al comentar las cifras y su presión sobre el empleo en la región.
“La clave estará en lograr que el ajuste sea lo más fluido posible para así evitar pérdidas excesivas en términos de actividad económica y empleo”, agregó el funcionario.