El Censo 2017 culminó a las 5:00 de la tarde en medio de una incertidumbre, ya que varios ciudadanos se quejan en redes sociales de no haber recibido a los censadores a pesar haberlos visto en las inmediaciones de su vivienda.
En el caso de los ciudadanos que viven en edificios multifamiliares, la mayoría de las quejas señalan que los empadronadores no llegaron a los pisos superiores de sus respectivos complejos residenciales.
La mayoría de las quejas provienen de distritos La Molina, Surco, San Juan de Lurigancho, Rímac y San Martín de Porres.
En el caso de San Juan de Lurigancho, las denuncias eran de familias que tenían sus casas propias e inclusive que tenían hasta dos pisos.
Pero las quejas no se limitaron a Lima, ya que también hay ciudadanos de Sullana en Piura y en Ucayali, en la selva peruana, hicieron públicas quejas en los medios de comunicación.