El crecimiento económico del Perú se mantendrá alto en comparación a la región debido a un mayor impulso fiscal y el inicio del proceso de reconstrucción, destacó hoy el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El FMI espera que el crecimiento de la economía peruana este año sea de 2.7%. Dicha proyección sucede a pesar de la desaceleración económica generada por los escándalos de corrupción de Odebrecht y El Niño Costero, señala el organismo multilateral.
Asimismo, el FMI destaca la rápida respuesta de las autoridades económicas a los cambios internos y externos en las condiciones económicas, a través de un mayor impulso fiscal, estímulo a la vivienda social, mejores condiciones de financiamiento para las micro y pequeñas empresas, así como a la reducción de encajes y tasa de política monetaria y menores costos no salariales para la contratación formal de empleos jóvenes.
En el mediano plazo, el FMI señala que la economía convergerá a su potencial de crecimiento de 3.75% debido al proceso de reconstrucción y la reactivación de proyectos de inversión afectadas por el escándalo de Odebrecht.
El Fondo también precisa que si el programa de reformas de la actual administración se despliega de una forma más rápida, incluyendo una reforma laboral y mayor inversión minera, el crecimiento potencial de la economía peruana podría acercarse a un rango de [4.0% – 4.5%].
La entidad multilateral saluda la combinación de medidas contracíclicas de corto plazo con reformas estructurales.
Específicamente, en el plano fiscal, justifica una expansión fiscal moderada y temporal en el corto plazo dada la buena credibilidad fiscal y los bajos niveles de endeudamiento con los que cuenta Perú. En el mediano plazo, dicho impulso fiscal deberá retirarse, consistente con una aceleración esperada del crecimiento económico.
Finalmente, en el plano fiscal, considera que los desafíos fiscales de corto y mediano plazo son asegurar una rápida y oportuna ejecución del gasto público, así como continuar incrementando la base permanente de ingresos fiscales.
El FMI destaca la decisión del MEF de iniciar un proceso de formulación presupuestal multianual, el cual se podrá complementar con un enfoque de riesgos fiscales, tal como se hace en Australia, Canadá o Suecia.