El proyecto de Ley de Institutos tiene, entre otros objetivos, poner en valor las carreras técnicas y lograr que se deje de lado el prejuicio de son de “segundo nivel”, respecto de las carreras universitarias, afirmó el director del Instituto de Estudios Peruanos (IEP), Ricardo Cuenca.

Según el experto en temas educativos, la propuesta enviada por el gobierno al Congreso de la República, no solo busca ordenar las carreras técnicas sino que complementa la reforma de la educación superior iniciada con las universidades.

Uno de los temas principales de la iniciativa es que hay un cambio drástico en los grados y títulos, que en la actualidad son una desventaja para el sistema de educación superior técnica y tecnológica si se compara con la universitaria.

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De aprobarse la norma, se equiparará los grados de la educación técnica superior con los de la educación universitaria. Es decir una persona que estudia cinco años en un instituto técnico obtendrá el grado de bachiller si cumple los requisitos que exige la ley y por lo tanto puede continuar estudiando una maestría y luego hacer un doctorado.

De acuerdo con Cuenca, en el Perú sí existen carreras técnicas de cinco años de duración, los cuales se ofrecen en los institutos pedagógicos o los calificados como “top” entre los que están Tecsup o Senati.

También se han creado categorías en las que solo se puede estudiar tres años y tener un grado técnico. Pero si se quiere estudiar una carrera técnica que tiene una naturaleza distinta, se estudia cinco años y se obtendría un bachillerato.

Los títulos también han cambiado. Habrá un título básico de técnico que certifica un oficio, uno intermedio de técnico (tras el bachiller técnico) y uno profesional que equivaldría a las licenciaturas de la universidad.

“Para que esto dispare o se gatille se necesitaría una muy fuerte campaña por parte del Ministerio de Educación, que es quien lidera este proceso, para empezar a modificar este imaginario que hay alrededor de la educación técnica que la ve como una de menor calidad que la universitaria, de segundo nivel”, dijo a Gestion.pe.

Cuestión social
Cuenca sostiene que la idea generalizada en el Perú de que un profesional técnico tiene menor “valor” que el universitario se legitimó porque se privilegió la educación universitaria apelando a las aspiraciones sociales, lo que jugó en contra a la educación técnica.

“La educación técnica no es un escalón previo a la universitaria, es una carretera distinta. Yo puedo tomar este camino y ser un buen técnico o seguir el otro que es el universitario. Lo que pasó en el país es que uno estudiaba algo técnico mientras tanto, para obtener un título universitario”, precisó.

El investigador refirió que los sistemas educativos de educación superior más sólidos que hay en el mundo son aquellos que tienen un equilibrio razonable entre la educación técnica y la univeristaria, sin que una sea mejor que otra.