Las lluvias continúan en la zona norte del país, en menor intensidad, pero la amenaza de más desbordes sigue latente poniendo en riesgo no solo viviendas y comercios sino también campos de cultivos.
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En este escenario, Moisés Pacheco Enciso, director general de Sanidad Vegetal del Senasa, advirtió la posibilidad de la presencia de plagas tras el Niño Costero, que podrían arrasar las siembras afectados por el evento climático e impactar aún más al norte peruano.
Por lo que la institución se prepara para hacer frente a esta situación y evitar la multiplicación de vectores que podrían poner en jaque regiones como Piura, Lambayeque, La Libertad, Tumbes, Cajamarca, entre otras zonas afectadas.
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“Son dos las plagas con altas probabilidades de surgir después de el Niño Costero, estas son las langostas migratorias y los roedores de campo que están normalmente asociados a fenómenos climáticos”, explicó a Gestión.pe.
Pacheco dio cuenta que, en el caso de las langostas migratorias, estas pueden surgir “fuertemente” en la zona norte del país, especialmente en la región Lambayeque dado que actualmente convergen todos los elementos para su propagación.
“Creemos que va resurgir fuertemente en la zona norte por que las lluvias han provocado que la flora silvestre se incremente bastante en los desiertos. ¿Qué pasa? Esta langosta en su estado normal se encuentra solitaria y cuando encuentra condiciones como las de ahora, en las que encuentra bastante vegetación silvestre producto de las lluvias, se empiezan a multiplicar”, detalló el especialista.
El problema surge, remarcó, cuando se acaban las lluvias y se termina el alimento natural de este vector. Entonces, estas langostas se juntan para migrar hacia las zonas que concentra la mayor humedad en busca de alimento, arrasando así con los campos de cultivos.
“Es en este periodo, cuando se agrupan que empiezan a depositar sus huevos y esta nueva generación es mucho más grande, de color amarillo intenso y viven juntos para migrar y arrasar cultivos o campos enteros”, subrayó.
¿Cómo evitar su expansión? El representante del Senasa agregó que una vez que termine el periodo de lluvias o estas sean de menor intensidad, y se tenga acceso a la zona norte, ingresarán para eliminar los focos donde se encuentra esta plaga.
Esto sería a fines de abril o inicios de mayo. “Ni bien bajen las lluvias vamos a poder acceder a esta zonas y estimamos que esto se de este mes para poder tomas las medidas del caso, localizar los focos y pode eliminarlos. Ese es el trabajo”, refirió el especialista.
Pacheco refirió que justo cuando se está en este periodo, que pasen las lluvias, es el mejor momento para ingresar a fin de realizar el control respectivo. “Este es el trabajo silencioso que hace el Senasa, para evitar la propagación de este vector. Esperamos que no sea de una magnitud demasiado grande, por lo que estamos en alerta”.
¿Si el Niño Costero se aplaza y continúan las lluvias más allá de abril, puede ser un riesgo para la labor de control del Senasa?
Al respecto, el Moíses Pacheco no descartó esta posibilidad. “Generaría que la vegetación silvestre siga manteniéndose verde y no nos permita atacar a la langosta, cuando debería ser la época de sequía la ideal para combatirla. Sí sería problema”, alertó.
En el caso de los roedores, el director de sanidad vegetal advirtió que en situaciones como el Niño Costero, se configuran las condiciones necesarias para su supervivencia al contar con fuente de agua, refugio y alimentación.
Para evitar también su propagación, el Senasa enfila sus baterías en dos trabajos de campo una vez que aminore la intensidad de las lluvias en las zonas afectadas.
La primera es con las comunidades para que limpien las acequias, eliminándose así las fuentes de agua, y para eliminar también las cosechas pérdidas, a fin de que no sean usadas como alimento por este vector. Y lo segundo es un programa de desparasitación de animales externos
“Dada las condiciones actuales, están en el mejor momento para multiplicarse naturalmente. Por supuesto que hay riesgo que se dispare en la zona norte, si no hace nada. Por lo que estamos trabajando desde ya para determinar dónde se ubican los focos y una vez que pase las lluvias, se trabaje con las comunidades para eliminar fuentes de agua y de alimentos, y con una medida final, de uso de químicos si es que supera 5%”, indicó.
El director general de Sanidad Vegetal remarcó que se está llevando adelante todas las acciones de prevención para evitar una alerta fitosanitaria. “Por el momento, el Senasa está trabajando para amenguar un posible efecto post Niño Costero”, puntualizó.