El presidente Ollanta Humala negó que esté desalentando la inversión en el Perú y sostuvo que, por el contrario, su gobierno ha desenredado el complejo tejido de permisos necesarios para desarrollar infraestructura, promovido el sector minero y lucha contra la contaminación provocada por esa industria.
“Una obra detenida nos sale muy caro porque se deteriora la obra”, dijo Humala durante una entrevista con la agencia AP desde Nueva York.
“Hemos enviado ya dos paquetes de normas al Congreso de la República para destrabar estos permisos que demoraban las inversiones. Por ejemplo, a un certificado de inexistencia de restos arqueológicos que se podía demorar un año o un año y medio, le hemos dado un plazo de 20 días. Ese es el plazo que tienen ahora para presentar el certificado, en caso de que lo amerite”, agregó.
Humala mencionó la autopista El Sol, la Línea 2 del Metro de Lima o el aeropuerto de Chinchero, en el Cusco, como ejemplos de proyectos que ha impulsado. Sin embargo, algunos de estos están retrasados.