Madrid (Reuters).- Las regiones españolas de Islas Baleares y Asturias se convirtieron el viernes en la séptima y octava comunidad en pedir ayuda al Gobierno nacional, en medio de una severa recesión y crisis financiera.
Baleares pidió 355 millones de euros (462 millones de dólares), de los que destinará 189 millones al pago de deudas y el resto a financiar su déficit. Más tarde, Asturias solicitó 261.7 millones de euros.
Estas dos regiones engrosan la lista de comunidades que se están adhiriendo al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) de España, tras las peticiones de ayuda de Canarias, Castilla-La Mancha, Andalucía, Cataluña, Valencia y Murcia.
El fondo, de 18,000 millones de euros, ha recibido hasta la fecha solicitudes por unos 17,000 millones de euros.
En un comunicado, el Gobierno balear dijo que decidió adherirse al mecanismo debido a que ofrece mejores condiciones que las del mercado financiero ordinario.
Por su parte, un portavoz del Gobierno asturiano explicó que la región pidió el rescate para “atender nuestros vencimientos y otro tipo de necesidades de financiación”.
España afronta desde 2008 una profunda y prolongada crisis económica que ha llevado a dos recesiones en el plazo de tres años y una tasa de desempleo que roza el 25% de su población activa.
El país está al borde de pedir asistencia financiera de sus socios europeos, en un intento por aliviar la crisis de deuda que afecta a la zona euro.