Fráncfort (Reuters).- Los préstamos a las empresas y familias en la zona euro se contrajeron por octavo mes seguido en diciembre, una señal de que los bajos costos del financiamiento tienen escaso éxito para revivir la inversión y el gasto.
El Banco Central Europeo (BCE) ha recortado sus tasas de interés a mínimos récord e inyectó más de 1 billón de euros al sector bancario, donde algunos prestamistas están comenzando a devolver préstamos anticipadamente en una señal de que las condiciones de financiamiento están mejorando.
Pero la emisión de préstamos permanece débil.
Los créditos al sector privado bajaron el 0.7% desde el mismo mes del año anterior, mostraron los datos del Banco Central Europeo, en línea con el rango medio de las previsiones en un sondeo de Reuters entre economistas.
“La zona euro podría estar dirigiéndose hacia la recuperación, pero el proceso no está siendo impulsado por el crédito”, dijo el economista Christian Schulz de Berenberg.
“El regreso de la confianza en el sector bancario podría estar oculto por la actual recesión y el despalancamiento”, aseveró.
El flujo mensual de préstamos a las firmas no financieras descendió en 22,000 millones de euros (unos 29,500 millones de dólares) en diciembre tras caer unos 7,000 millones de euros en noviembre.
El flujo mensual de créditos a las familias mostró una reducción de 3,000 millones de euros tras una subida de 6,000 millones de euros en el mes previo.
Los fondos baratos que el BCE está inyectando en el sistema monetario siguen sin llegar a las familias y los negocios en forma pareja en toda la zona euro, en momentos en que algunas naciones se esfuerzan por volver a encarrilar sus alicaídas economías, aunque se han hecho avances.
En el desagregado por cada país, los datos mostraron una caída de 22,000 millones de euros en los préstamos al sector privado español, la mayor retracción mensual desde julio.
En Portugal, los préstamos al sector privado se redujeron en 2,600 millones de euros, la mayor disminución en un año. Italia mostró una saludable subida de 12,600 millones de euros a 1,757 billones de euros en los préstamos al sector privado.