La inflación de julio estaría próxima a 0.15%, con lo cual la trayectoria anual subiría ligeramente a 2.8%, ubicándose por segundo mes consecutivo dentro del rango meta, afirmó el banco Scotiabank.

“Esta percepción está prácticamente en línea con la proyección del Banco Central de Reserva (BCR) de entre 0.15% y 0.20%, ritmo similar al registrado en julio del 2016 (0.18%)”, indicó el analista senior del Departamento de Estudios Económicos del Scotiabank, Mario Guerrero.

Agregó que el nivel general de precios se habría recuperado luego de tres meses de caídas, tras revertir los efectos de El Niño Costero durante el primer trimestre del 2017.

Los precios de los alimentos descendieron por cuarto mes consecutivo, esta vez debido al significativo descenso de los precios avícolas (-10%), posiblemente por una mayor oferta, y en menor medida por menores precios de tubérculos y azúcar.

No obstante, se registraron alzas en algunos alimentos destacando el limón (con más de 80%), debido a una menor oferta derivada de los estragos del Fenómeno de El Niño, según funcionario del sector en Piura, camote (+35%), sandía (+33%) y melón (+23%), entre otras frutas, que estarían reflejando una menor oferta así como factores de estacionalidad.

El componente estructural de los precios, medido por la inflación sin alimentos ni energía, habría seguido descendiendo, pasando de 2.4% en junio a 2.3% en julio, el ritmo anual más bajo para los meses de julio desde el 2011, tendencia que estaría relacionada a la debilidad de la demanda interna.

Este comportamiento de los precios es el relevante para la toma de decisiones de política monetaria, indicó en el Reporte Semanal del banco.

Las tarifas de energía eléctrica fueron reajustadas ligeramente al alza (0.9% para usuarios residenciales), al igual que las tarifas de telecomunicaciones, debido al reajuste de 12.5% en el costo del servicio de cable.

El precio de las gasolinas se reajustó hacia el alza hasta en dos ocasiones durante el mes, sin embargo en términos promedio mensual (válido para el cálculo del IPC) descendieron, por sexto mes consecutivo.

El precio de balón de gas licuado de petróleo (GLP) envasado se elevó 1.8% en promedio.

En cuenta
Un elemento a tener en cuenta en adelante, son los precios de los alimentos importados. Los precios de commodities agrícolas, como el trigo, vienen experimentando significativas alzas (+50%) en el mercado internacional en lo que va del año.

De persistir estos precios elevados podrían presionar hacia el alza aquellos alimentos que utilizan el trigo como insumo (industria de panificación por ejemplo). El arroz importado también registra un aumento de 15% en los primeros siete meses.

El tipo de cambio ha estado presionado hacia la baja, por lo que el BCR ha intervenido en el mercado cambiario, como no lo hacía hace dos meses y medio, comprando US$ 558 millones a un tipo de cambio promedio de S/ 3.24, neutralizando su incidencia sobre los precios de los bienes transables (como alquileres o electrodomésticos).

La mayor oferta de dólares tendría una naturaleza temporal y estaría relacionada al apetito de los inversionistas por bonos soberanos tras la exitosa colocación de bonos por S/ 10,000 millones en el mercado internacional la semana pasada.

En recientes declaraciones, el presidente del BCR, Julio Velarde, señaló que evalúan reducciones adicionales a la tasa de interés de referencia, así como a los requerimientos de encaje en dólares.

Si bien no precisó el momento en que se adoptaría la medida, consideramos que el descenso de las expectativas inflacionarias a 12 meses, la debilidad que muestra la demanda interna y la desaceleración del crédito, elevan la probabilidad de un nuevo recorte en su reunión del jueves 10 de agosto.

“En nuestros reportes anteriores ya habíamos adelantado esa posibilidad. Durante los últimos tres meses el BCR ha reducido en dos ocasiones su tasa de interés de referencia”, indicó.

El BCR ha proyectado que la inflación se mantendría dentro del rango meta (entre 1% y 3%) durante el segundo semestre del 2017 y que se ubicaría en 2.3% a fin de año.

“Nuestras proyecciones son menos optimistas y consideran que la inflación se ubicaría en 2.8% a fines del 2017”, precisó Guerrero.