En enero el ritmo de inflación será similar al del mismo mes del 2016 (0.37%), debido al aumento estacional de los precios de los alimentos perecibles y a los reajustes en los precios de la gasolina, ante las presiones alcistas en el precio internacional del petróleo, proyectó el Scotiabank.
Compensaría en parte el efecto de un menor nivel del tipo de cambio y la estabilidad que registraría en este mes las tarifas de energía eléctrica, indicó la analista senior del Scotiabank, María Katya Sahuay.
Anualizada
La trayectoria de la inflación anual se mantendría en enero por encima del rango meta (entre 1% y 3%) debido principalmente a shocks de oferta por alimentos perecibles y combustibles, señaló en el Reporte Semanal del banco.
La inflación se ha mostrado reacia a permanecer dentro del rango meta (sólo estuvo dentro en julio y agosto), pues diversos shocks de oferta han provocado desviaciones respecto de su objetivo, indicó.
En el 2016 la inflación alcanzó a 3.23%, ubicándose por tercer año consecutivo por encima del rango de inflación del Banco Central de Reserva (BCR).
No obstante, la inflación sin alimentos y energía registró un ritmo de 2.9% en el año, al igual que las expectativas inflacionarias (2.9% para el 2017).
En ambos casos se mantuvieron dentro del rango objetivo. Esto explica por qué el directorio del BCR ha optado por dejar sin cambios su principal herramienta de política monetaria, indicó Sahuay.
Adicionalmente, no se registran presiones de inflación por costos, pues la inflación mayorista, medida por la variación del Índice de Precios al por Mayor (IPM) fue de sólo 1.9%.
“Bajo esos mismos criterios, consideramos probable que en su reunión de política monetaria de este jueves, el directorio del BCR mantenga por once meses consecutivos su tasa de interés de referencia sin cambios, en 4.25%”, agregó.
En diciembre influyó sobre la inflación la subida de los precios de los alimentos, en particular las hortalizas y legumbres (2.7%), debido a una menor producción por los problemas de ausencia de lluvia (déficit hídrico) la cual afectó en particular al precio de la cebolla china subiendo 59.8%.
También influyeron los mayores precios de los pasajes en ómnibus provincial con (17.1%), debido a la mayor demanda por fiestas de fin de año.
Este incremento fue contrarrestado por la reducción de precios de los tubérculos, como la papa amarilla (-1.2%), que cayeron por segundo mes consecutivo.