(Adaptado de “How Successful People Network With Each Other”, de Dorie Clark)
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Cambie el tono de una conversación difícil
Si trabaja con alguien el suficiente tiempo es muy probable que encuentre una diferencia de opinión. Pero cuando una conversación difícil empieza a salirse de control, ¿cómo volver a encarrilarla? Primero, entienda que cuando la gente discrepa a menudo se debe a que una parte malinterpreta como ataque personal la retroalimentación recibida, como por ejemplo “Si te gusta mi idea, te caigo bien” o “Si no te gusta mi idea, no te caigo bien”. Para reducir la tensión, es importante deliberadamente reafirmar su compromiso con la relación; para que así no hay ninguna confusión sobre realmente de qué se trata la discusión. Separe las cuestiones personales de las cuestiones de negocios enfocándose momentáneamente en la relación, usando declaraciones como “realmente quiero trabajar en esto contigo” y “apuesto que podemos encontrarle la vuelta juntos”. Reafirmar su compromiso con la otra persona puede alterar significativamente el tenor de la conversación.
(Adaptado de “Defusing an Emotionally Charged Conversation With a Colleague”, de Ron Friedman)
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Aprenda mientras está en el trabajo
Muchos relegamos el aprendizaje a programas formales encabezados por instructores. Pero, de hecho, es posible incorporar el aprendizaje a lo que ya hace todos los días. Por ejemplo, puede hacer uso de una reunión de equipo para trabajar en sus habilidades de comunicación. Una mañana contestando correos electrónicos puede convertirse en una oportunidad para aplicar un nuevo sistema de organización. Una tarde de interacciones con los clientes puede convertirse en una oportunidad para afinar su discurso de desarrollo de negocios. Enfóquese en una habilidad que quiera desarrollar, e investíguela en Internet; puede encontrar blogs de expertos en la materia sobre casi cualquier tópico, y ni hablar de una generosa oferta de videos en YouTube. Después, fije una serie de metas pequeñas y progresivas y reclute a un colega para que preste atención a su esfuerzo de formación de habilidades dándole retroalimentación periódica.
(Adaptado de “You Can Learn and Get Work Done at the Same Time”, de Liane Davey)
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Reprograme sus suposiciones respecto de sus colegas
Para cuando llevamos trabajando varios meses con alguien, hemos desarrollado ciertas expectativas sobre lo que dirá y hará. Pero si quiere tener buenas relaciones en el trabajo, es importante intentar ver a los colegas tal como son ahora, no como solían ser. Como experimento, intente simplemente volver a observar a sus colegas. ¿Cómo se ven hoy? ¿Cuál es su tono de voz? ¿Cuáles son sus expresiones faciales? ¿Realmente están diciendo lo mismo de siempre o hay algo nuevo que usted pueda notar y apreciar? Mejorar la observación lleva a un mejor entendimiento, lo que a su vez lleva a mejores opciones, decisiones y acciones. Y las mejores opciones, decisiones y acciones convienen a todo mundo.
(Adaptado de “See Colleagues as They Are, Not as They Were”, de Duncan Coombe)
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Evite que su equipo se agote
Ya es bastante difícil manejar el estrés propio. ¿Pero cómo puede ayudar a los miembros de su equipo a manejar sus sensaciones de estrés, agotamiento mental o desvinculación? Una propuesta consiste en enfocarse en el crecimiento y desarrollo personal de sus empleados. Ofrezca herramientas como capacitación en consciencia plena y resiliencia. Fomente que la gente se tome tiempo para hacer ejercicio u otras actividades de renovación, como hacer reuniones mientras camina. Integre espacios en la agenda de entregas para que la gente pueda trabajar flexiblemente y a un ritmo manejable. Promueva que la gente haga una cosa a la vez al definir hitos que no se yuxtapongan, y evite la trampa de confundir lo urgente con lo importante. Permita tiempo y espacio para que la gente se desconecte fuera del trabajo, y actúe deliberadamente en lo que respecta a ayudarla a que haga pausas y se recargue durante los ciclos bajos. Finalmente, no cuesta nada ser amable. Hacer un buen trabajo y fomentar que las personas se sientan bien no solo es posible, sino que es la base de un equipo de alto desempeño.
(Adaptado de “Help Your Team Manage Stress, Anxiety and Burnout”, de Rich Fernández)
Distribuido por The New York Times Syndicate