Santiago (Reuters).- El grupo energético Enersis dijo el martes que planea lanzar una Oferta Pública de Acciones (OPA) por la filial que reuniría sus activos de generación fuera de Chile, en caso de ser exitosa una controvertida reorganización.

La reestructuración de Enersis, propuesta por su controladora italiana Enel, contempla la fusión con sus filiales de generación Endesa Chile y de distribución Chilectra mediante la separación de las actividades en el país de las otras que poseen en la región.

El plan, resistido por algunos de los fondos de pensiones chilenos pero acogido por la mayoría del directorio de Enersis, incluye una serie de divisiones y fusiones de las sociedades controladas por el grupo, para crear finalmente “Enersis Chile” y “Enersis Américas”.

Para asegurar el éxito de la operación, Enersis dijo que es su intención presentar una OPA por todas las acciones y ADR de Endesa Chile que no estén en su poder.

“Dado que con posterioridad a las divisiones Enersis Américas se estima será propietaria de un 59.98% de las acciones emitidas por Endesa Américas. Dicha OPA será por hasta el 40.02% del capital de Endesa Américas”, dijo Enersis en una carta al regulador de valores.

El precio de la OPA sería de 236 pesos por acción.

Así, Enersis Américas manejaría los negocios de generación, distribución y transmisión eléctrica que posee actualmente el grupo en Argentina, Brasil, Colombia y Perú. En tanto, Enersis Chile controlaría a la generadora Endesa en el país y también la distribuidora local Chilectra.

En una carta adjunta, Enel se comprometió a que su filial Enel Green Power invertirá en proyectos de energía renovable junto con Endesa Chile, la que podrá participar en hasta un 40% del valor de las eventuales iniciativas.

Enel propuso a fines de julio la reorganización de Enersis y sus filiales, un plan que ha encontrado la oposición de accionistas minoritarios como las poderosas Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) chilenas, que dudan de las reales intenciones de la firma europea.

Las AFP alegan que la propuesta de Enel representa una operación entre partes relacionadas, mientras que la Superintendencia de Valores (SVS) determinó que se trataría de fusiones.