Por Manuela Zurita
La compañía de seguros de vida y jubilación Interseguro tiene su foco puesto en la infraestructura. “Lo que buscamos son mayores proyectos de infraestructura”, asegura su vicepresidente de Inversiones, Enrique Espinoza. Con US$ 1.200 millones en cartera y uno de los retornos más altos del mercado (en los últimos cinco años captó 8,79%, 150 puntos básicos por encima de la industria), la firma del Grupo Interbank busca afianzarse en lo tangible y de largo plazo.
“¿Cuál es la ventaja? Muchos de estos proyectos tienen un tipo de garantía de gobierno y una rentabilidad indexada a la inflación”, sostiene y explica que no solo les atraen las tasas de inversión que ofrecen, sino la posibilidad de aportar su granito de arena al desarrollo del país.
La estrategia es parte de su tradición de inversiones. De hecho, de su portafolio (75% colocado en el Perú y 25% en el exterior), los bonos soberanos y cuasisoberanos representan el 31% de los instrumentos de renta fija. Estos últimos son a su vez los más representativos de la cartera, con 75% del total.
“El principal atractivo como compañía de seguros es que tienes la tranquilidad de que la posibilidad de que un gobierno entre en default es muy baja”, dice y apunta que en lo que se refiere a este tipo de capitales hoy “están invertidos” en empresas en América Latina, EE. UU., Reino Unido y Corea. “Son países con rating grado de inversión”, justifica. Como se precisó, también lo están en el Perú, cuya nota crediticia fue elevada a BBB+ a fines de octubre pasado por la calificadora Fitch Ratings.
“Nosotros hemos estado muy invertidos en bonos peruanos porque confiábamos en la situación macroeconómica del país y esto se ha visto en la calificación. Desde el punto de vista de las inversiones, al tener el país un mejor rating, esto se ve reflejado en las tasas, que van a tener un rendimiento menor, pero te da mayor seguridad al invertir”, dice y pronostica.
Bajo el esquema de renta fija, invierten en empresas del sector eléctrico, exportador y de la construcción, cuyo flujo de caja y ratios financieros se pueden predecir en el tiempo. El 42% está invertido en soles nominales y ajustados por la inflación; y el 58%, en dólares.
Al cierre del 2013, Espinoza estima que su plan de inversiones rendiría entre 9,5% y 10%, un poco menos que los 11,3% del 2012.