Helsinki (Reuters).- Los nuevos teléfonos avanzados Lumia , de Nokia , están penetrando en el mercado y las primeras señales sugieren que se podrían estar vendiendo lo suficientemente bien como par darle al fabricante algo de tiempo en su lucha contra los líderes de la industria, Samsung y Apple .
Sin embargo, los inversores no deberían esperar un vuelco rápido en la atribulada empresa finlandesa, ya que algunos dispositivos de sus rivales como las minitabletas están capturando la atención de los consumidores, dijeron analistas.
“Las críticas positivas son un gran comienzo, pero -como hemos visto muchas veces antes- esto no implica que se traduzca en sólidos volúmenes de ventas por sí mismo”, dijo Pete Cunningham, analista de la firma de investigación Canalys.
El éxito en las ventas de su más reciente modelo Lumia 920 y de las versiones 820 es crucial para la supervivencia de Nokia .
El ex líder del mercado está consumiendo sus reservas de capital para compensar sus pérdidas en participación de mercado en teléfonos avanzados de alta gama y en dispositivos más baratos.
El analista de FIM Securities Michael Schroder estima que Nokia venderá de 1 millón a 3 millones de sus nuevos teléfonos este trimestre.
La empresa vendió 2,9 millones de los viejos modelos Lumia en el tercer trimestre, en comparación con las ventas de alrededor de 26,6 millones de iPhones que tuvo Apple en el mismo período.
“En cualquier caso, la aceptación no va a ser masiva”, predijo Schroder.
Las ventas del Lumia podrían servir como veredicto sobre la decisión que tomó en febrero del 2011 el presidente ejecutivo Stephen Elop de asociarse con Microsoft en lugar de usar el Android de Google o continuar desarrollando el propio sistema operativo de Nokia.
Inversores temían que las pobres opiniones y las ventas débiles produjeran el fin del negocio de smartphones de Nokia el año próximo.
Hasta el momento, las opiniones de Los consumidores parecen favorecer la sensación y la imagen de los nuevos modelos, que incluyen cámaras de alta definición y el último software de Microsoft, Windows 8.
Eso implica una mejora en la reacción del mercado desde la presentación del nuevo modelo. Las acciones de Nokia cayeron un 13 por ciento aquel día, con inversores citando una falta de factor sorpresa.