(Bloomberg).- Nintendo Co. dejó de lado su resistencia a permitir que sus personajes jueguen en los smartphones en tanto el creador de Mario y Zelda se asocia a DeNA Co. para desarrollar nuevos juegos para dispositivos móviles fabricados por terceros.
Las compañías japonesas también acordaron formar una alianza de capital en la que comprarán participaciones de 22,000 millones de yenes (US$ 181 millones) una de la otra.
Nintendo y DeNA brindarán a los miembros nuevos servicios que incluyen aplicaciones de juegos basadas en la línea de productos de Nintendo de plomeros, gorilas y princesas. Las acciones alemanas de Nintendo alcanzaron el valor intradía más alto en casi tres años.
La estrategia del presidente Satoru Iwata de vender software solo para los aparatos Nintendo se vio cuestionada en tanto el pasaje de los consumidores a los juegos móviles afecta la demanda de la consola Wii U y el dispositivo de bolsillo 3DS.
Las acciones de la compañía se desplomaron 80% desde el 2007, el año en que hizo su debut el iPhone de Apple Inc., y la red de juegos de Mobage de DeNA ha perdido usuarios ante los teléfonos inteligentes.
“Nintendo y DeNA están desesperadas, por lo que es lógico que unan fuerzas”, dijo Mitsushige Akino, responsable ejecutivo de Ichiyoshi Asset Management Co. en Tokio. “Hay posibilidades de que puedan atraer nuevos usuarios a su plataforma para smartphones”.
Las empresas desarrollarán juegos originales optimizados para dispositivos inteligentes en lugar de tomar títulos de la Wii U y el 3DS, de acuerdo con un comunicado. Nintendo también fabrica la Wii mini y el 2Ds portátil.
Dilema de Iwata
Iwata dijo que Nintendo separadamente está trabajando en una consola cuyo nombre en código es NX. No dio más detalles.
“No hay motivos para ser pesimistas respecto del futuro de las consolas de juegos”, declaró Iwata en Tokio el martes. “Creemos que es posible generar sinergias aprovechando los respectivos puntos fuertes que ofrecen las plataformas”.
Iwata se resistió a recurrir a los smartphones durante años porque decía que los juegos de la compañía están diseñados para sus propias máquinas, en las que los jugadores pueden usar un joystick y botones físicos para moverse en el mundo virtual. También ha dicho que, al impulsar la demanda de software, crecerán las ventas de hardware y viceversa.
El dilema de la compañía es tener que diferenciar sus productos para los smartphones a la vez que usa personajes emblemáticos para fomentar la demanda de los dispositivos propios. Aun cuando tuviera éxito, a Nintendo podría costarle generar utilidades significativas en un mercado dominado por los títulos gratuitos.
“Nintendo se arriesga a diluir sus personajes y acelerar las deserciones de su propia plataforma de hardware”, opinó Amir Anvarzadeh, gerente de ventas de acciones japonesas de BGC Partners Inc. en Singapur. “Las acciones probablemente sigan subiendo, simplemente porque el mercado ha esperado durante mucho tiempo algún tipo de estrategia de dispositivos inteligentes”.