La industria de la publicidad se encuentra buscando todas las pistas posibles sobre los futuros planes de Twitter después de que su actual CEO, Dick Costolo, haya anunciado que el próximo 1 de julio abandonará su cargo siendo reemplazado por el fundador de la compañía, Jack Dorsey hasta que se encuentre un sustituto.
Según el portal Marketing Directo, no cabe duda de que Twitter está atravesando una serie de dificultades en los últimos tiempos. Aunque la red social se ha posicionado como una de las plataformas más poderosas de comunicación, está teniendo problemas para construir una audiencia masiva de usuarios activos.
Retos para la publicidad
No obstante, el sitio especializado reconoce que la plataforma constituye una opción poderosa desde el punto de vista de la publicidad aunque no ha conseguido sumar los ingresos que los inversores esperaban obtener a través de esta vía.
“Twitter necesita alguien que sepa qué rumbo hay que tomar”, ha señalado a Adweek un ejecutivo de publicidad digital que ha preferido mantener su identidad en el anonimato. Este ha señalado que el enfoque publicitario de Twitter como vehículo de respuesta directa es erróneo, de acuerdo a lo difundido por Marketing Directo.
Con todo, Twitter aún tiene algunos ases en la manga que puede explotar. Cuenta con algunas oportunidades convincentes en materia de publicidad como su reciente acuerdo con la NFL y el patrocinio de marcas. A esto hay que sumar que la red social se ha convertido en uno de los elementos clave en las conversaciones sociales a la hora de ver la televisión.
Costolo fue el responsable de una reciente adquisición en la que muchos ven el futuro de Twitter: Periscope, aplicación de vídeo en streaming que ha despertado el interés de las compañías de medios y las marcas. A pesar de refinar el sistema, no ha conseguido una popularidad tan generalizada como la que tienen Facebook o Instagram.
Además, ahora cuenta con un acuerdo con Google para permitir a sus clientes utilizar DoubleClick para comprar espacios publicitarios y los tuits ahora han comenzado a aparecer en los resultados de búsqueda. De hecho Google y Twitter han crecido tan cerca que muchos piensan que al gigante de las búsquedas sólo le queda comprar la red social.