(Bloomberg).- Bank of Nova Scotia, el banco canadiense con mayor exposición a nivel internacional, planea invertir C$ 350 millones (US$ 241 millones) en los próximos años para mejorar sus operaciones de crédito minorista (retail) en México, Chile, Colombia y Perú, y ampliar su oferta en estos mercados.
Scotiabank esbozó su plan de gastos y objetivos de crecimiento de ingresos para los cuatro mercados prioritarios en América Latina, a los que denomina como naciones de la Alianza del Pacífico, durante una conferencia de inversionistas en México esta semana.
El banco con sede en Toronto se ha centrado en estos países debido a su relativa estabilidad económica, demografía y perspectivas de crecimiento.
“Para el 2018, habremos invertido más de C$ 350 millones en la Alianza del Pacífico, en un esfuerzo por reducir nuestros costos estructurales, optimizar nuestras operaciones y revitalizar nuestras plataformas bancarias”, dijo hoy el jefe de banca internacional del grupo, Dieter Jentsch, al final del evento de dos días.
Los objetivos de ingresos de Scotiabank para los próximos tres a cinco años para Chile, Colombia y Perú proyectan una tasa de crecimiento anual compuesta de al menos 10%, impulsada por el fortalecimiento de los depósitos, la atracción de más clientes, la creación de alianzas y el aprovechamiento de la tecnología.
Se prevé que los negocios bancarios en Chile y Colombia cuenten con un crecimiento anual de ingresos de 11% a 13% dentro de los próximos tres a cinco años, mientras que el crecimiento en Perú será del 10% a 12%.
“Tenemos listas las estrategias adecuadas que se centran en generar relevancia y presencia en estos mercados mediante el desarrollo de relaciones más primarias con clientes, la simplificación y digitalización de la experiencia del cliente y la optimización de nuestra estructura para financiar el crecimiento”, dijo Jentsch. “Para el 2018, vamos a ser un mucho mejor banco”.
México, la mayor operación latinoamericana de Scotia, será un “banco diversificado más ágil y más competitivo” con más ofertas digitales y una base de clientes más amplia, dijo Jenstch.
En Perú aceleraremos las tarjetas de crédito y el negocio de pagos y ampliaremos la red de sucursales, mientras que Colombia evolucionará hacia un banco universal más diversificado con más ofertas, dijo.
Chile será más ágil y se basará en la compra de Scotiabank del año pasado de una participación en el negocio de servicios financieros del minorista Cencosud SA para impulsar la rentabilidad a través de la expansión de tarjetas de crédito, dijo.