- -* La Unión Europea resucita una investigación sobre las prácticas publicitarias de Google con preguntas que se suman a las activas investigaciones antimonopólicas de la Unión Europea sobre los servicios de búsqueda de compras y el sistema operativo móvil de la compañía.
En las últimas semanas, la Unión Europea ha hecho preguntas a compañías que participan en publicidad online sobre la conducta de Google, según tres personas familiarizadas con la investigación que pidieron que no se revelara su identidad porque el proceso en confidencial.
Los funcionarios buscan información que pueda usarse para la elaboración de una declaración de objeciones que determine áreas en que sospechan que Google viola las normas antimonopólicas, dijeron.
El pago de US$ 1.000 millones que hizo Google a Apple Inc. para mantener su barra de búsqueda en el iPhone es el tipo de acuerdos de exclusividad que los organismos reguladores buscan detectar.
La decisión de la Unión Europea retoma parte de una investigación anunciada en el 2010 sobre contratos con sitios web que excluyen a servicios de publicidad no pertenecientes a Google y acuerdos con firmas de venta de computadoras y software que impiden utilizar otras herramientas de búsqueda.
Motor clave
La mayor parte de los US$ 74,500 millones de ingresos de Google en el 2015 procedió de publicidad. Su servicio de avisos AdWords, que presenta promociones junto con los resultados de búsquedas y contenidos web ha sido un motor clave en el crecimiento de las ventas de Google.
Al Verney, un vocero de Google , de Alphabet Inc., y funcionarios de la Comisión Europea en Bruselas se negaron a hacer declaraciones. Tanya Ridd, una portavoz de Apple en Londres, no contestó un llamado ni un correo electrónico.
La apertura de un nuevo frente contra Google se produce en momentos en que el máximo responsable ejecutivo, Sundar Pichai, se reúne esta semana por primera vez con la comisionada de Competencia, Margrethe Vestager, en un contexto de crecientes problemas en la Unión Europea para la compañía de Mountain View, California.
A la comisión se le agotó la paciencia con Google en abril luego de que tres propuestas de acuerdo no resultaran satisfactorias a los ojos de los críticos.
Vestager presentó una protesta formal en la que amenazaba con multas y generó cambios en la forma en que se presentaban los resultados de búsquedas. Se acusó a Google de “favorecer de manera sistemática su propio producto de compras en sus páginas generales de resultados de búsquedas”.
El equipo de Vestager de la comisión de la Unión Europea trabaja activamente en otra queja, esta vez contra el sistema operativo móvil de Google . La investigación examina los acuerdos de Google con las firmas fabricantes de tablets y teléfonos inteligentes que les exigen instalar aplicaciones de Google en sus aparatos.
Los organismos reguladores también han examinado protestas de que la compañía favorece sus propios servicios de mapas y viajes en detrimento de otros.
