Bloomberg.- Aun cuando algunos analistas dicen que el oro se ve costoso, el alza recién podría estar empezando.
En medio de un mes agitado en la política estadounidense y la seguridad mundial, los operadores han impulsado los futuros del oro cerca de un máximo de nueve meses.
Pero si la historia de la relación entre el oro y el petróleo es una guía, esa alza podría durar más que el estallido en la tensión geopolítica.
El metal precioso ha subido un 11% en 2017 para negociarse a US$ 1’294,40, en comparación con una caída del 10% en el crudo. Esa divergencia en el precio todavía puede estar ocurriendo, lo que significa que el oro debería seguir superando al petróleo antes de que finalice el ciclo de 34 meses, según un estudio de patrones de negociación pasados de los dos activos.
“El oro ha subido durante el reciente revés del mercado y ahora está probando su nivel de resistencia clave de US$ 1,300”, escribió Matt Maley, estratega de acciones de Miller Tabak & Co., en una nota a los clientes.
“Ese es el nivel que interrumpió las alzas en abril y junio, por lo que si finalmente puede superar el nivel de manera significativa, será muy positivo para el metal amarillo”, agrega.
Ya sea por factores técnicos o por la amenaza de un descarrilamiento del crecimiento económico de Estados Unidos, los administradores de dinero están acudiendo al oro. Las apuestas netas alcistas sobre el metal son las más altas desde octubre, según datos de la Commodity Futures Trading Commission.
Mientras tanto, los inversionistas han colocado US$ 321 millones en el fondo cotizado en bolsa SPDR Gold Shares en lo que va de este mes, mientras que han retirado US$ 540 millones del fondo SPDR Energy Select Sector, según datos recopilados por Bloomberg.