(Bloomberg) Chile, el mayor exportador de cobre del mundo, prevé que los precios de este metal aumentarán en un tercio en el largo plazo a causa de la creciente demanda de China, el mayor consumidor.

El cobre podría registrar un precio promedio de US$6.330 por tonelada después de 2018, según dijo el martes a la prensa Sergio Hernández, vicepresidente ejecutivo de la Comisión Chilena del Cobre, o Cochilco, desde la ciudad de Perth en Australia. El metal, que se utiliza en cables y tuberías, ha subido cerca de un 8% desde la mínima que registró en enero. La tonelada se cotizó a US$4.667 a las 13:30 horas de Chile.

Hacia finales de esta década podríamos ver una escasez del metal, según Rio Tinto Group, mientras que Freeport-McMoran Inc, el mayor productor de cobre que cotiza en la bolsa, prevé que el mercado podría registrar un déficit tan pronto como el próximo año. China consume aproximadamente la mitad de la actual producción mundial de cobre y eso aumentará a un 58 por ciento dentro de 10 años, dijo Hernández.

“La producción no cuenta con grandes inversiones en comparación con la demanda”, agregó Hernández, quien proyecta que los precios se mantendrán cerca de los niveles actuales durante el resto del año y que el próximo aumentarán a un promedio de US$ 4,850. “Tenemos un alto nivel de confianza en relación al aumento de los precios”.

Las compañías mineras se apresuran a tomar medidas en vista de un pronóstico de déficit global. Este mes, Rio y sus asociados aprobaron una expansión de US$ 5,300 millones para elevar a más del doble la producción de la mina de oro y cobre Oyu Tolgoi ubicada en Mongolia. BHP Billiton está estudiando una opción de US$ 2,200 millones para ampliar las operaciones de la minera Spence en Chile y así prolongar su vida útil en unos 50 años.