(Reuters).- Los precios del cobre repuntaban el martes en medio de un declive del dólar, pero no se esperaban avances significativos para el mercado hasta que los inversores tengan mayor claridad sobre las perspectivas de la demanda en China, el mayor consumidor mundial del metal industrial.
El cobre a tres meses en Londres subía casi un 1% a US$ 5,535 la tonelada a las 1006 GMT, luego de haber cerrado el lunes con fuertes pérdidas a US$ 5,480 la tonelada.
Un debilitamiento del dólar ayuda a los precios de los metales al abaratar los costos para los tenedores de otras monedas.
“Desde la perspectiva de los metales, necesitamos ver una mejoría de los datos macroeconómicos de China para elevar un poco la confianza”, dijo un analista de Deutsche Bank.
“Algunos de los indicadores se han estabilizado, y otros están mostrando señales tentativas de mejoría, pero para elevar la confianza necesitamos ver una tendencia de continuidad”, sostuvo.
Otro factor que presiona al cobre es la menor actividad por el verano boreal que afecta la demanda en China, un país que representa alrededor de la mitad del consumo global, estimado en cerca de 22 millones de toneladas este año.
En tanto, el níquel operaba con alzas a US$ 11,895 la tonelada, desde los US$ 11,700, mientras que el aluminio a tres meses cotizaba con bajas a US$ 1,680 la tonelada desde US$ 1,689 la tonelada de la sesión anterior.
Los precios del zinc se negociaban casi estables en US$ 2,055 la tonelada, el plomo subía levemente a US$ 1,818 y el estaño avanzaba a US$ 15,570.