Lima (Reuters).- La moneda peruana cerró estable hoy, en una jornada en la que el ruido generado por la renuncia del primer ministro hizo que el mercado pasara por alto un avance de las plazas externas.

La incidencia de la salida de César Villanueva tras un roce con el ministro de Economía, Luis Castilla, por una posible alza del sueldo mínimo fue breve, dejando en evidencia el peso que tiene el titular de la clave cartera económica, quien es bien visto por los inversores, dijeron analistas.

El sol finalizó a 2.806/2.807 unidades por dólar, frente a las 2.805/2.807 unidades del viernes. Los negocios ascendieron a US$ 297 millones, un monto menor al usual. En la jornada, el sol se negoció entre 2.804 y 2.809 unidades por dólar.

La moneda local acumula una caída del 0.25% en el año.

“Hubo pocos flujos, el sol se mantuvo por la renuncia del primer ministro. Si no se hubiera dado este tema político, posiblemente se hubiese fortalecido”, dijo un agente cambiario.

A nivel global, las acciones estadounidenses subían animadas por recientes noticias de fusiones y adquisiciones de empresas que resaltaban la recuperación de la economía de Estados Unidos.

En tanto, el dólar de debilitaba frente a una cesta de monedas fuertes ante un aumento del apetito por activos de riesgo en medio de expectativas de que Ucrania reciba ayuda internacional, calmando los temores en torno al endeudado país.

En el mercado paralelo de monedas de Lima el tipo de cambio operaba en 2.810/2.811 unidades por dólar.