(Reuters).- El oro retrocedió desde máximos de 10 semanas vistos durante la noche ante la debilidad de las acciones, mientras operadores tomaron ganancias en el metal precioso antes de una reunión clave de la Reserva Federal de Estados Unidos esta semana.
Las expectativas de que la Fed pueda reducir aún más su programa mensual de compra de bonos impulsaron al dólar, mientras que se registraba una demanda de monedas de refugio seguro como el yen ante una continua ola vendedora en los mercados emergentes.
El oro al contado se negoció en 1,260.30 dólares la onza, con un descenso de un 0.7%, luego de tocar durante la noche su precio más alto desde mediados de noviembre a 1,278.01 dólares la onza.
En tanto, los futuros para entrega en febrero en Estados Unidos bajaron 4 dólares la onza, a 1,260.30 dólares.
El metal tuvo dificultades para mantener las ganancias de la semana pasada antes de una reunión de política monetaria de dos días que la Fed iniciará mañana.
Una caída de un 2.3% en las acciones mundiales la semana pasada ayudó a impulsar al oro por quinta semana consecutiva, en su mayor racha de ganancias semanales desde mediados del 2012.
Los mercados bursátiles ampliaron sus pérdidas, dado que las preocupaciones sobre la desaceleración económica y el sector bancario informal de China, junto a expectativas de que la Reserva Federal reducirá aún más sus medidas de estimulo monetario, están ejerciendo presión en los mercados emergentes que dependen del financiamiento externo.
Entre otros metales preciosos, la plata cayó un 0.4%, a 19.77 dólares la onza. El platino al contado perdió un 0.6%, a 1,413.49 dólares la onza, mientras que el paladio cedeó un 0.9%, a 725.50 dólares la onza.