El dólar sigue subiendo y parece no incomodar a los peruanos interesados en percibir sus pensiones de jubilación y seguros en esta divisa, aseguró Mario Ventura, gerente general de Seguros Sura.
Ventura indicó que, desde un inicio, el traspaso de los fondos de AFP hacia seguros de vida se contrató para pensiones en dólares, y se ha evidenciado un incremento de 13% entre noviembre y enero de este año.
“Ya tenemos un tipo de cambio en el nivel de S/. 3, y se esperaría que la gente se incline por el dólar. Por ello, estimamos que la demanda total de pensiones en dólares debería cerrar en un 20 o 25%”, acotó.
Asimismo, recalcó que la demanda por el dólar era baja en el 2014, en un orden del 4% de fondos transferidos a rentas vitalicias. No obstante, los activos en dólares llamaron la atención este año, y es importante el avance porque funcionarán como activos para calzar las obligaciones de pago con otros inversionistas extranjeros.
“Hay que analizarlo en ciclos largos, porque la tendencia es que uno contrata una pensión a 20 o 30 años. Las variaciones a corto plazo no son decisivas. Es probable que el dólar siga esa tendencia (alcista) pero también podría regresar al ciclo de los últimos diez años (a la baja)”, acotó.
Además, resaltó que los que más demandan pensiones en esta moneda son aquellas personas de avanzada edad y con elevado patrimonio, que vivieron las épocas de una moneda golpeada. Evidentemente, no les genera una confianza en soles a largo plazo, y por eso apuestan en dólares, indicó.
Ventura también afirmó que la modalidad de pensión más vendida sigue siendo la renta vitalicia diferida, con un crecimiento del 80% entre enero y diciembre del 2014. “Se vende más la renta diferida a dos años, porque la cuota que se paga es el doble de los periodos restantes”, agregó.
Sin embargo, Ventura no dejó de lado a la modalidad de soles indexados a la inflación, que resulta muy atractiva en dólares, porque se ejecutan en función a bonos ajustados por inflación, y es más fácil buscar dichos instrumentos en dólares que en soles.
Indicó que esta última modalidad requiere de un periodo garantizado contratado, es decir, que al morir el beneficiario principal, los familiares reciban la misma pensión como si estuviera vivo.
“Esto genera certeza financiera, y lo puedes contratar por 10 o 15 años, es oportuna para el contexto económico y lo hemos propuesto a la SBS para su respectiva evaluación”, acotó.