El 21 de setiembre del 2015 pasará a la historia por ser el día más nefasto en la historia de Volkswagen, ya que sus acciones sufrían su peor baja (más de 20%) en casi seis años luego de que las autoridades de Estados Unidos acusaron a la automotriz alemana de falsificar datos de emisiones de sus vehículos, lo que significa que podría enfrentar penalidades por hasta US$ 18,000 millones.