El editorial de Gestión: “Cuando los políticos pueden aportar”

No se puede subestimar el aspecto político de un ministerio. Los problemas a nivel nacional no solo requieren de una buena solución, sino también de un buen manejo.

GABINETE TÉCNICO. La rapidez con la que se ha compuesto el nuevo Gabinete ha generado algunas sospechas acerca de la espontaneidad bajo la cual el ex primer ministro, César Villanueva, dejó el cargo. No obstante, no caben dudas de que en la recomposición del Gabinete -improvisada o no- se han impuesto las credenciales técnicas a las afinidades políticas (en la mayoría de casos).

René Cornejo, quien pasó del Ministerio de Vivienda y Construcción a la PCM, por ejemplo, tiene más de 13 años trabajando en el Estado. El entrante Ministro de Energía y Minas, Eleodoro Mayorga Alba, tiene una marcada trayectoria en el sector energético, con más de 40 años de experiencia. Piero Ghezzi, elegido para llevar la cartera de Producción, también es un reconocido economista, que ha sido el jefe de economía global y de mercados emergentes de Barclays a nivel mundial.

De similar manera, para los ministerios de Agricultura y Desarrollo e Inclusión Social se eligió a los viceministros –cargos con perfiles técnicos– para liderar sus respectivas carteras.

En teoría, todo esto suena bastante bien. Las capacidades técnicas y la experiencia son dos cualidades dignas de aprecio a la hora de dirigir todo un ministerio. No obstante, en la práctica, los ministros –en diferente medida– son cargos políticos. En ese aspecto, este Gabinete presenta una carencia que puede resultar peligrosa.

Uno de los mayores problemas de este Gobierno ha sido su incapacidad para comunicar. Particularmente, para comunicar los beneficios de reformas importantes y necesarias que se han pretendido implementar en los diferentes sectores. Así, tenemos como ejemplos el desastre de la reforma de las AFP, las huelgas relacionadas a la reforma de salud y las protestas que despertó la reforma del servicio civil, además de la famosa crisis de “las vacas flacas”. Todo lo anterior con incidencias en la estabilidad económica y política del país.

En otras palabras, lo que decimos es que no se puede subestimar el aspecto político de un ministerio. Los problemas a nivel nacional no solo requieren de una buena solución, sino también de un buen manejo del problema.

ÚLTIMA HORA ver todas

BLOGS ver todos

Revolución digitalPablo Bermudez

Bye bye Dubai... ¡Bienvenido NEOM! (1 de 3)

Herejías EconómicasGermán Alarco

Plan Estratégico de Desarrollo Nacional (PED...

El Vino de la Semana

Pisco, amor por el Perú

Te lo cuento fácilAlumnos de la Universidad del Pacífico

Guerra en Ucrania: un breve análisis del fac...

Economía para todosCarlos Parodi

Estados Unidos y China

WALL STREET VER TODOS

Será noticia

JOSÉ ANTONIO MONTENEGRO