Editorial: Igualdad ante todo

Ninguna persona debe ser descalificada por sus creencias religiosas, pero un país no puede ser conducido a base de ellas.

La Corte Suprema de Estados Unidos fallo a favor del matrimonio igualitario
La Corte Suprema de Estados Unidos fallo a favor del matrimonio igualitario

DERECHOS CIVILES.En setiembre del 2013, en esta columna afirmamos que el proyecto de la unión civil debía ser apoyado por diversos motivos. El principal de ellos, asegurar el derecho a la igualdad, respetar el derecho de las personas a hacer lo que crean conveniente con tal de que no dañen a ningún tercero. Además, porque también existen razones de orden económico.

Lamentablemente, durante el debate al interior de las comisiones del Congreso se dejaron de lado los aspectos de derecho y primaron las creencias personales –algunas de ellas religiosas–, lo que llevó al archivamiento del proyecto.

El pasado viernes, la Corte Suprema de Estados Unidos aprobó el matrimonio entre personas del mismo sexo en todos sus estados. Sin duda, fue un fallo aplaudido desde varios rincones del mundo, y en el Perú muchas personas, e incluso empresas, mostraron su apoyo a esta decisión, con la esperanza de que alguna vez se replique en nuestro país.

El fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos se basa en el principio de la igualdad de todos ante la ley, reconocido en su Constitución. “Piden igual dignidad a los ojos de la ley. La Constitución les otorga ese derecho”, reza la sentencia. El presidente Barack Obama declaró que dicha decisión era una victoria para Estados Unidos, pues las personas del mismo sexo tendrán los mismos derechos en todo el territorio estadounidense.

El principio de igualdad ante la ley también figura en la Constitución peruana (artículo 2), sin embargo, durante el debate, el actual Congreso se olvidó de ello. El Parlamento, este o el próximo, debe replantear sus argumentos y volver a discutir este tema.

Esperamos que un próximo presidente sea más directo en sus opiniones y no diga, como el presidente Ollanta Humala, (quien olvidó que representa a más de 31 millones de peruanos y que el Perú es un Estado laico) que “cada país tiene su particularidad, sus propias realidades. Lo que funciona en un país no tiene que funcionar necesariamente en nuestro país, y viceversa”.

Ninguna persona debe ser descalificada por sus creencias religiosas, pero un país no puede ser conducido a base de ellas. Por lo tanto, mantenemos la esperanza de que alguna vez prime la igualdad en este tema.

RELACIONADAS

ÚLTIMA HORA ver todas

BLOGS ver todos

Revolución digitalPablo Bermudez

Bye bye Dubai... ¡Bienvenido NEOM! (1 de 3)

Herejías EconómicasGermán Alarco

Plan Estratégico de Desarrollo Nacional (PED...

El Vino de la Semana

Pisco, amor por el Perú

Te lo cuento fácilAlumnos de la Universidad del Pacífico

Guerra en Ucrania: un breve análisis del fac...

Economía para todosCarlos Parodi

Estados Unidos y China

WALL STREET VER TODOS

Será noticia

JOSÉ ANTONIO MONTENEGRO