De acuerdo a un audio difundido por “Cuarto Poder”, el contralor Édgar Alarcón intentó convencer a un funcionario de su institución de que retire una denuncia en su contra.

Walter Grados Aliaga, abogado y auditor de la Contraloría en el año 2016, denunció a Alarcón por “supuestos ilícitos” ante la presidenta del Congreso, Luz Salgado, y ante la Comisión de Fiscalización del Parlamento.

Aliaga se encontraba destacado ante la comisión investigadora de la “narcopolítica”, que presidió la entonces congresista Rosa Mavila.

Según el audio presentado en el reportaje, Alarcón, quien en ese entonces era vicecontralor, le dijo a Grados: “Quisiera, más bien, que evalúes una posibilidad. Tómalo como posibilidad. Se me ha ocurrido ahorita. ¿Qué pasaría si es que retiras la denuncia del Congreso? Y yo te (doy) los descargos, y si no, personalmente, yo te acompaño y denunciamos (…) Piénsalo, Walter, no quiero presionarte, no te estoy hostilizando, no te estoy chantajeando. Entonces, por la amistad que tenemos te digo, piénsalo, nada más te digo”.

¿Por qué lo denuncia? En el reportaje se da cuenta de que entre el 2002 y el 2015, el alto funcionario y sus hijos compraron poco más de 90 vehículos de reconocidas marcas. Según la denuncia, entre el 2013 y el 2015, siendo vicecontralor, Alarcón adquirió nueve autos por un total de US$ 182,550, los cuales, según señalaron, no los declaró, pero además “nunca debió comprar para negocio, pues la ley se lo impedía”.

Alarcón descartó irregularidades y señaló que se comunicó con Grados, ya que en ese momento estaban en el tema de la reestructuración de la institución, “y a mí me sacaba del foco de los temas habituales, de querer transformar la Contraloría, a estar luego sustentando y respondiendo esta denuncia”.

Finalmente, la denuncia no progresó en el Legislativo.