Los bolivianos comenzaron a votar hoy en unas elecciones presidenciales donde se espera la contundente reelección de Evo Morales, impulsado por una bonanza económica que en nueve años de “socialismo originario” abatió la pobreza del país andino a mínimos históricos.
El carismático ex sindicalista cocalero cuenta con una ventaja de 40 puntos en los sondeos para lograr su tercer mandato consecutivo, en el que los analistas esperan que siga aumentando el rol del Estado en la economía pero con una mayor apertura hacia el sector privado y la inversión extranjera.
Morales ha nacionalizado empresas en sectores clave como hidrocarburos, minería y telecomunicaciones, lo que le permitió subir el gasto público y financiar planes sociales para madres solteras, ancianos y estudiantes, que redujeron la pobreza en más de 15 puntos porcentuales, el mayor avance en la región.