A propósito de la amenaza nuclear de Corea del Norte, China sigue siendo el único aliado y su principal socio económico. Sin embargo, la alianza bilateral parece debilitarse por el comportamiento del líder norcoreano Kim Jong-un.
Según un informe publicado por el medio español ABC, a China le interesa mantener al régimen norcoreano porque supone un colchón de seguridad contra los miles de ‘marines’ establecidos en su frontera y porque no quiere recibir a los miles de refugiados en caso el gobierno actual desapareciera.
Sin embargo, China se muestra cada vez más hostil con su vecino. El país asiático apoyó a las sanciones de la ONU contra el último ensayo nuclear y, ahora, consolida su papel como mediador en el desafío militar ante EE.UU.
El medio español también recuerda que, de acuerdo con información publicada por Wikileaks, China no tiene una influencia decisiva en Norcorea y nunca fue determinante para lograr su desarme total.