Bloomberg.- La ciudad que convirtió a Donald Trump en multimillonario – y que se rio de él durante décadas por ser un hombre de negocios arrogante cuyos matrimonios y divorcios eran el alimento de los periódicos sensacionalistas – está a su merced.
Cuatro de cada cinco neoyorquinos votaron en contra del imprudente republicano nacido en Queens. Si elige castigar a la ciudad más poblada de Estados Unidos, no sería difícil. Más del 10% de su presupuesto anual de US$ 80,000 millones proviene del gobierno federal.
El plan de Trump de desmantelar la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible podría costar a la ciudad miles de millones de dólares en reembolsos de Medicaid, lo cual destruiría los hospitales públicos, dijo el alcalde Bill de Blasio.
De Blasio, un demócrata que buscará la reelección este año, citó esos temores en una reunión de alcaldes estadounidenses en Washington el miércoles en un esfuerzo por organizar la oposición bipartidista a las políticas de Trump.
En vísperas de la toma de mando del nuevo presidente, Blasio pretende unirse a varias celebridades y a miles de manifestantes en una protesta en el Trump International Hotel & Tower en Central Park West de Manhattan.
“Hay una serie de cosas muy específicas que he establecido que son esenciales para detener los impulsos extremos de la administración Trump y ese es el plan en el trabajamos ahora”, afirmó de Blasio el martes.
El alcalde, de 55 años, dice que los objetivos que defiende Trump de desregular Wall Street, reducir los impuestos, fomentar escuelas subsidiadas, tomar medidas enérgicas contra los inmigrantes indocumentados y derogar la ley del cuidado de la salud conocida como Obamacare, perjudicarán a los neoyorquinos y solo beneficiarán a los ricos.
Sin embargo, los partidarios de Trump, dicen que el control republicano sobre la Casa Blanca y el Congreso ofrece una oportunidad para impulsar el crecimiento económico y beneficiar a todos los residentes de la ciudad.
“La idea de que Trump será malo para Nueva York, no creo que ocurra en lo absoluto”, dijo Aaron Renn, investigador principal del Manhattan Institute, un centro de investigación sin fines de lucro financiado por empresas que favorece los bajos impuestos y la reducción del gasto en programas de ayuda social. “Esta es la casa de Trump. Tiene grandes inversiones aquí. ¿Por qué querría hacerle daño a la ciudad que ama?”.
La derogación del Obamacare podría hacer que 1.6 millones de neoyorquinos pierdan el seguro de salud, lo que provocaría el colapso del sistema de salud de la ciudad que cuenta con 11 hospitales públicos y decenas de consultorios, dijo el alcalde.
El sistema ya tendrá que enfrentar un déficit de US$ 2,000 millones en los próximos años, y un mayor apoyo federal y estatal es menos probable ahora.
A fin de frenar el intento de derogación, los trabajadores de la ciudad y los voluntarios han contactado a 45,000 neoyorquinos sin seguro para que inscriban a todas las personas que puedan antes de que la nueva administración pueda actuar.
