Seúl (AFP).- Samsung Electronics anunció este miércoles que estaba intentando verificar las declaraciones de hackers alemanes, que afirman haber conseguido burlar el sistema de reconocimiento del nuevo Galaxy S8 mediante escáner del iris.
Al lanzar al mercado este innovador smartphone, el gigante surcoreano esperaba superar definitivamente uno de los peores momentos de su historia: la humillante devolución mundial de su Galaxy Note 7, que corría el riesgo de explotar.
Sin embargo, los investigadores del Chaos Computer Club (CCC), un grupo alemán fundado en 1981, compartieron un vídeo que en el que parecían mostrar cómo se puede desbloquear el S8.
Lo consiguen, no con el iris del propietario, sino con una fotografía del ojo de este, que lleva una lentilla superpuesta para reproducir la curvatura del globo ocular.
“Una fotografía en alta definición tomada de Internet es suficiente para restablecer un iris”, explicó el portavoz de CCC, Dirk Engling. “Lo que es irónico es que hemos obtenido los mejores resultados con las impresoras láser de Samsung”, señaló.
Además añadió que el tradicional código PIN aseguraba una mejor protección del smartphone.
Un portavoz de Samsung comunicó que el gigante surcoreano había abierto una investigación.
La tecnología de reconocimiento por iris fue “desarrollada con rigurosas pruebas”, afirmó Samsung en un comunicado. “Si existe una vulnerabilidad o un nuevo método que ponga en peligro nuestros esfuerzos para asegurar la seguridad, responderemos lo más rápido posible”, apuntó.
La devolución mundial del Note 7 supuso para Samsung miles de millones de dólares en beneficios perdidos. Se minó además la credibilidad del gigante surcoreano, que se vio obligado a presentar disculpas y a aplazar el lanzamiento del S8.
Sin embargo, este nuevo modelo ha sido muy bien acogido desde su salida en abril.
El CCC ya aseguró en 2013 que había logrado piratear el sistema de reconocimiento biométrico de los iPhone 5S de Apple.
“La huella del usuario del teléfono, fotografiada de la superficie de un vaso, fue suficiente para crear una falsa huella digital que permitió desbloquear el iPhone 5S”, detalló el Chaos Computer Club, apoyándose también en un vídeo.
El portavoz de la asociación explicó a la AFP que era “muy fácil” de hacer, incluso para un principiante, tomando la huella de un vaso o una botella.
Consideró que era “completamente estúpido utilizar (para asegurar la seguridad de un aparato) algo que no se puede modificar y que vas dejando por todos lados”.