(Bloomberg).- Subaru Corp. evalúa versiones eléctricas de sus modelos existentes para la primera incursión de la compañía automotriz en la tecnología en momentos en tanto se suma a sus pares del mundo en lo relativo a asignar dinero a vehículos a batería en un contexto de endurecimiento de las normas sobre emisiones.
La compañía japonesa, que planea hacer inversiones récord en investigación y desarrollo este año financiero, analiza instalar mecanismos de transmisión eléctrica en los modelos actuales en lugar de diseñar un auto por completo nuevo, dijo el viernes en una entrevista el máximo responsable, Yasuyuki Yoshinaga, que tiene 63 años.
La decisión podría permitirle a Subaru aprovechar su reputación de seguridad al tiempo que eliminaría la necesidad de asociarse con otra compañía automotriz, agregó.
Esa estrategia contrastaría con el abordaje de otras empresas como Mercedes-Benz, de Daimler AG. La compañía de autos de lujo ha agrupado su tecnología de vehículos eléctricos, comprendidas las cajas de carga y el almacenamiento de energía, bajo la submarca EQ, lo cual le da mayor visibilidad a los efectos de competir mejor con Tesla Inc. Yoshinaga considera que mantener un solo nombre tiene sus ventajas.
“Si ya hay un modelo Subaru atractivo, como por ejemplo el todoterreno XV, y si un cliente de Pekín quiere uno pero sólo se le permite comprar un vehículo eléctrico, no puede comprarlo si no hay una versión eléctrica”, dijo en la sede de la compañía automotriz en Tokio. “Brindar la opción de un vehículo eléctrico significa que el cliente puede seguir eligiendo el mismo Subaru”.
Gasto en I+D
Subaru prioriza el gasto en electrificación por encima de otras tecnologías como la autos conectados y autónomos, y trabaja para poder lanzar al mercado un modelo híbrido eléctrico el año próximo y un vehículo exclusivamente eléctrico para el 2021.
La compañía tiene un presupuesto de 134,000 millones de yenes (US$ 1,200 millones) en investigación y desarrollo en los 12 meses hasta marzo de 2018, más del doble de lo que gastó en el año hasta marzo del 2014.
El gasto de Subaru en I+D sigue siendo menor que el de grandes compañías automotrices japonesas que también redoblan los esfuerzos por producir vehículos eléctricos.
Toyota Motor Corp., que tiene una participación de 16.9% en Subaru, planea gastar 1.05 billones de yenes en investigación y desarrollo en el actual año fiscal, mientras que Honda Motor Co. invertirá 750,000 millones de yenes.
Las acciones de Subaru subieron 0.3% a las 10:15 en las operaciones de Tokio, mientras que el índice Topix de referencia trepó 0.3%.
Toyota apunta a lanzar un modelo eléctrico global y Honda presentó el mes pasado una versión eléctrica de su sedán Clarity. Honda también ha dicho que planea crear una empresa conjunta con Hitachi Automotive Systems Ltd. para el desarrollo y la producción de motores para autos eléctricos.