A pesar de que las especificaciones técnicas de la Surface Pro de Microsoft son bastante decentes, el híbrido de la referida compañía no ha logrado convencer a diversos críticos, quienes han llegado a considerar que, en este equipo, no se ha logrado juntar a una “laptop pura con una tablet pura en una única pieza de hardware”.
Con una pantalla de 1080p, un procesador Intel Core i5, cuatro GB de memoria RAM y disponible en dos versiones, según su capacidad de almacenamiento 64 ó 128 GB, una de las falencias de la Surface Pro reside en su grosor (1.3 centímetros) y peso (900 gramos), los cuales son adecuados para un ordenador portátil mas no para una tablet.
El portal CNN Expansión ha calificado como un “problema central” el tamaño del híbrido, cuya pantalla es de 10.6 pulgadas y tiene una proporción de 16:9. Una laptop -en promedio- posee una pantalla de 11.5 pulgadas y una proporción de 16:9; mientras que el tamaño de una tablet es aún menor, su pantalla puede tener como máximo 10 pulgadas y cuenta con una proporción de 4:3. Si se toma en cuenta estas características, se puede considerar que la Surface Pro es -ante todo- una laptop y no una tablet.
“El Pro tiene algunas desventajas significativas, especialmente como tableta (…) Es demasiado pesada y necesita demasiada energía para superar a la tableta líder, el iPad grande de Apple. También es demasiado difícil de utilizar en el regazo”, comentó Walt Mossberg en el blog All Things D.
Por su parte, la batería dura oficialmente entre cuatro y seis horas. Empero, si el equipo es utilizado en condiciones moderadas, es decir, el usuario no realiza tareas intensas, la batería dura de tres a cuatro horas. En la prueba realizada por el portal The Verge, el Pro duró 3 horas, 59 minutos. “Por debajo de lo aceptable para un ultrabook, y menos de la mitad de lo que se esperaría de una tablet”, según la referida página.
Otra de las críticas efectuadas al híbrido tiene que ver con su capacidad de almacenamiento. Surface Pro está disponible en dos versiones, de 64 GB y 128 GB. En ambas, el sistema Windows 8 ocupa alrededor de 40 GB de espacio, dejando menos cantidad de gigabytes disponibles. Así, la versión de 64 GB le permite al usuario aprovechar un máximo de 23 GB, mientras que la Surface Pro de 128 GB deja -en realidad- 87 GB libres.
No obstante, el híbrido funciona bastante bien con Windows 8. Gracias al procesador Intel, se puede ejecutar aplicaciones heredadas de Windows. “El Pro simplemente vuela, incluso desde el momento en que lo enciende, es rápido”, de acuerdo al sitio especializado en tecnología The Verge.
Como ya se ha mencionado, aunque cuenta con interesantes especificaciones, Surface Pro es considerada como “un trabajo en curso, aún inacabado” por el portal CNNMoney. En tanto, The Verge ha puntualizado lo siguiente: “En su campaña por ser ambas (laptop/tablet), la Surface es ninguna en realidad”.