Una blusa se carga de política cuando lleva una etiqueta de Ivanka Trump.
Las opiniones públicas sobre la marca de modas de la hija de Donald Trump se dividen en frentes políticos, según nuevos datos de percepción del consumidor de la firma de investigación YouGov BrandIndex. Los consumidores liberales ven la marca mucho más negativamente que los conservadores y los moderados, según la encuesta.
“Claramente en las burbujas de la costa oeste y la costa este (de Estados Unidos), su marca tendrá menos atractivo”, dijo Allen Adamson, fundador de la consultora BrandSimple con sede en Nueva York y expresidente del directorio de la firma de marcas Landing Associates para Norteamérica.
Mientras que los compradores conservadores encuestados por YouGov tienen una impresión ligeramente positiva de la marca Ivanka Trump, en su punto más alto en el último mes la marca registró solo 19.4 puntos en el índice. Las puntuaciones pueden ir de -100 a 100, con cero representando una posición neutral.
Los consumidores moderados tienen percepciones ligeramente negativas de la marca, mientras que la opinión de los consumidores liberales fue claramente negativa, cayendo hasta -57.4.
YouGov entrevista a 4,800 personas cada día de la semana de un panel en línea representativo de más de 1.8 millones de personas.
¿Ha estado un simple par de tacones alguna vez tan imbuido de veneno partidista? Probablemente no.
Es un poco más complicado cuando se observan las opiniones por género. A fines de mayo, los hombres tenían una percepción más positiva de ella que las mujeres, aunque la opinión de cada género de la marca Ivanka Trump ha fluctuado fuertemente en las últimas semanas.
La hija presidencial experimentó un pico en la percepción positiva entre mujeres alrededor del tiempo cuando lanzó su nuevo libro, Women Who Work (algo así como, Mujeres que trabajan), que ofrece consejos profesionales.
En respuesta al intenso escrutinio de los conflictos de interés que rodean a su familia, Trump no se embarcó en una típica gira para promocionar el libro, perdiendo una oportunidad para mejorar su perfil y su marca. Desde entonces, el impulso que su marca recibió de las mujeres cuando el libro fue lanzado parece haber desaparecido.
Un representante de Ivanka Trump se rehusó a comentar inmediatamente.
Trump, de 35 años, ahora funcionaria oficial no remunerada del gobierno estadounidense, anunció en enero que estaba entregando la gestión del día a día de su marca a su lugarteniente Abigail Klem.
La compañía de capital cerrado licencia su nombre a proveedores que fabrican productos, incluyendo una línea de ropa de US$ 100 millones fabricada por G-III Apparel Group, así como zapatos y accesorios.
Trump ha transferido sus activos a un nuevo fideicomiso supervisado por familiares de su esposo, Jared Kushner, conservando la propiedad de la compañía y recibiendo pagos. No planea desprenderse de su marca, dijo Jamie Gorelick, su abogado en la firma WilmerHale.
La politización de la marca Ivanka Trump lleva algún tiempo. Cuando sus productos comenzaron a desaparecer de tiendas como Nordstrom, Neiman Marcus y ShopStyle después de las elecciones del año pasado, los activistas anti Trump lanzaron una campaña nacional para boicotear a cualquier minorista que vendiera productos de la familia Trump.
Algunos partidarios trataron de contraatacar, llamando a boicots de cualquier persona que dejara de vender productos Trump.
La marca de Ivanka siempre ha estado entrelazada con la de su padre, y aún más ahora, ya que frecuentemente aparece con él en eventos oficiales de la Casa Blanca y asume muchos de los deberes tradicionales de una primera dama. Como resultado, cualquier posibilidad que su índice de aprobación mejore es mucho más improbable, dijo Adamason, el consultor.
