El surf del Perú está en su mejor momento. Se acaba de coronar campeón del mundo en los ISA World Surfing Games 2016, y va camino a convertirse en uno de los deportes que puede generar un importante movimiento económico y comercial.

Karin Sierralta, director ejecutivo de la Federación Nacional de Tabla (Fenta), estimó en US$ 25 millones el monto que anualmente mueve el surf, y US$ 45 millones los que genera el turismo por este deporte.

“Para competir en alto nivel, el presupuesto anual, entre equipos y viajes, es de aproximadamente US$ 100,000 al año”, indicó Sierralta. En cuanto a los aficionados, dijo que pueden gastar US$ 100 en una tabla y US$ 70 en un traje de segunda.

Esta cifra, sin embargo, contrasta ampliamente con los ingresos que percibe un surfista profesional.

En el Perú hay 150,000 de esos deportistas, entre aficionados y profesionales. De ellos, solo 35 reciben patrocinios o apoyo de empresas (sponsorship), que puede ir desde la entrega de ropa hasta dinero.

Sierralta dijo que dependiendo del nivel, proyección, imagen y resultados, un surfer profesional puede ganar entre US$ 500 y US$ 10,000 mensuales.

Correr la ola del IPD es otra historia. El Programa de Apoyo al Deportista (PAD) de esa institución financia a los surfistas con un sueldo que va de S/ 800 a S/ 3,500 mensuales. Solo hay 22 tablistas en este programa, reveló Sierralta.

“Falta más apoyo para los chicos que intentan vivir del surf, participando en eventos profesionales, pues esa es la mejor plataforma para mantenerse en el top”, explicó.

La industria del surf
Sin embargo, la situación de este deporte en el Perú cada vez es más optimista. “Se han hecho siete mundiales de la ISA (International Surfing Association) en todas las modalidades. Somos parte del circuito latino y del circuito mundial WSL (World Surf League) en juniors. Ahora toca elevar la valla y organizar más campeonatos profesionales de mayores de alto nivel”, comentó.

No obstante, aún no se corre el mejor heat. Sierralta aseguró que hace falta traer torneos con grandes premios en efectivo y que otorguen puntos para el ranking mundial. De esta forma se puede elevar la reputación internacional del Perú y atraer mayor inversión a este deporte.

Además, mencionó la importancia de no descuidar los eventos de la selección nacional, al menos uno por año.

La ola olímpica
Hace unas semanas el surf fue anunciado como disciplina olímpica. Debutará como tal en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Por ello, la Fenta ha logrado la aprobación del proyecto de construcción del Centro Panamericano del Surf en Punta Rocas, al sur de Lima.

“Ahí tendremos las instalaciones deportivas para entrenar más grandes del mundo. Con ello estaremos a la vanguardia de lo que luego será un centro de preparación y entrenamiento para las futuras generaciones”, reveló Karin Sierralta.

El entrenamiento diferenciado del equipo nacional para las Olimpiadas de Tokio 2020 es otra historia. Sierralta aseguró que “estamos presentando los presupuestos para cumplir con los objetivos. Para ello, tendremos que sustentar que esto (el entrenamiento especial) es necesario”.

Karin Sierralta estimó que el presupuesto para lograr las metas competitivas en las Olimpiadas es de US$ 800,000 anuales.